TikTok tiene 150 millones de usuarios en EE. UU. en medio de la prohibición o la venta
Pese al desagrado y las presiones del gobierno estadounidense, TikTok sigue creciendo su base de usuarios significativamente. Hoy ya tiene 150 millones de personas conectadas a la plataforma de entretenimiento, un 50 por ciento más respecto a 2020.
“Casi la mitad de Estados Unidos vienen a TikTok a conectar, a crear, a compartir, a aprender, ¡o sólo a tener algo de diversión!”, reveló Shou Zi Chew, director Ejecutivo de la empresa de origen chino, a través de un video corto en la plataforma.
Shou Zi Chew anunció, además, que en la actualidad alrededor de 5 millones de negocios en el país utilizan TikTok para llegar a sus clientes. La mayoría de ellos son pequeñas y medianas empresas (pymes).
El ejecutivo destacó que el hito de usuarios llega en un momento crucial para la compañía, ya que algunas políticas buscan prohibir la plataforma y alejarla de las 150 millones de personas que la usan.
La divulgación de Zi Chew llega a pocos días de que el directivo se presente ante el Comité de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes, donde se espera que los congresistas hagan duros cuestionamientos acerca de la seguridad y privacidad en la plataforma de contenido.
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Zi Chew adelantó que expondrá estas nuevas cifras al Congreso y explicará todo lo que TikTok está haciendo para proteger a los estadounidenses que usan la aplicación, en línea con su visión de “inspirar la creatividad y traer alegría”.
Asimismo, el ejecutivo pidió a la comunidad que expresen comentarios sobre lo que les gustaría que los legisladores sepan acerca de la importancia de TikTok, pues la compañía está convencida de que en los últimos años la preferencia entre la población ha incrementado y su presencia es cada vez más relevante en el país.
La semana pasada, la empresa dijo que el gobierno de Joe Biden exigió que ByteDance, la empresa matriz dueña de TikTok, venda sus acciones en la aplicación, o de lo contrario podría prohibir su funcionamiento.
Desde la administración de Donald Trump, la compañía ha sorteado presiones gubernamentales para vender sus operaciones en Estados Unidos, ya que las autoridades consideran que la participación china en la aplicación representa una amenaza a la seguridad nacional.
TikTok ya rechazó antes vender sus activos a Microsoft y Oracle. Y hasta ahora ni Zi Chew ni ningún otro ejecutivo ha hecho declaraciones respecto a si los accionistas chinos están dispuestos a desinvertir, pero es probable que rechacen la medida nuevamente.
Mientras tanto, el presidente Joe Biden ya prohibió a los trabajadores de las agencias de gobierno que utilicen TikTok en sus dispositivos oficiales y ordenó a las dependencias que eliminen la aplicación de sus sistemas. Algunas universidades también han restringido su uso.
Otros países como Canadá y miembros de la Unión Europea han hecho lo mismo que Estados Unidos. Afganistán, Irán y Pakistán, por otro lado, censuran ciertos contenidos debido a que consideran que van en contra de sus valores.
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En este mismo mes de marzo, la Cámara de Representantes de Estados Unidos votó a favor de un proyecto de ley que busca otorgar al gobierno el poder de vetar a la plataforma de entretenimiento del país.
“Los estadounidenses merecen saber hasta qué punto su privacidad está en peligro y sus datos son manipulados por la relación de TikTok, propiedad de ByteDance, con China. Lo que es peor, sabemos que las grandes empresas tecnológicas, como TikTok, usan algoritmos dañinos para explotar a los niños con fines de lucro y exponerlos a contenido peligroso en línea”, dijo el Comité de Comercio y Energía la semana pasada.
Contrario al cuestionamiento del Congreso, la plataforma advierte que hoy TikTok es muy relevante para las personas y los negocios, pues millones de creadores utilizan la aplicación para generar y consumir contenido relevante y las empresas la ven como una herramienta para expandir sus negocios en línea.
El 23 de marzo, Shou Zi Chew tendrá su primer gran enfrentamiento con los legisladores. Tendrá la difícil tarea de intentar convencer a muchos congresistas de ambos partidos decididos a prohibir la plataforma.