Madeleine Clavijo abrió un unicornio de pagos digitales en Colombia: Kushki

Madeleine Clavijo es colombiana, ingeniera y cofundadora de un unicornio: Kushki. DPL News presenta esta entrevista exclusiva con la directora de Ingresos de la empresa ecuatoriana de pagos y presidenta de la Asociación Colombia Fintech. 

Migración y carrera profesional

Originaria, de Ocaña, en el Norte de Santander, al cumplir 16 años de edad, tras terminar el colegio, Madeleine Clavijo Vergel emigró a la capital colombiana, Bogotá, para empezar su carrera profesional.

Estudió Ingeniería Industrial y después hizo un posgrado en Marketing en la Universidad Externado de Colombia y un máster en Marketing Digital y Comercio Electrónico por la Universidad de La Rioja, en España.

Sector financiero y pasión por los pagos digitales 

Clavijo tiene 25 años de experiencia en el sector financiero, los últimos 10 dedicados al sector de la tecnología financiera (Fintech). “Ya me había empezado a meter mucho en el mundo digital y mi carrera siempre ha estado en el círculo de pagos”, cuenta en la entrevista.

“Para mí el mundo de pagos digitales, además de que es la industria de Kushki, es un sector indispensable para cualquier negocio”, asevera, y explica que, sin importar el servicio que presten, todas las empresas necesitan tres cosas para operar: un lugar, la gente, y cómo cobrar a sus clientes y cómo pagarle a sus proveedores y a su equipo.

El mundo de pagos es un mundo transversal en cualquier economía, cualquier país y cualquier vertical de negocio y eso ha sido justamente lo que me ha llevado a que cada día me apasione más por este entorno de los pagos”.

La fundación de un unicornio de pagos andino

Aaron Schwarzkopf y Sebastián Castro, ambos ecuatorianos que desde jóvenes emigraron a Estados Unidos, identificaron la necesidad latente que tenían las empresas de expandir su negocio en toda América Latina con una sola conexión y tuvieron la idea de fundar una empresa con la visión de ‘conectar Latinoamérica con pagos’.

Clavijo asegura que, previamente, no existía una solución que permitiera a “las compañías poder operar y procesar en todos los países localmente sin estar presentes ahí o crecer y extenderse a otros mercados para ofrecer sus servicios”, ya que, históricamente, “los jugadores presentes en la región no habían ofrecido innovación y nuevos servicios, productos y herramientas en los sistemas de pago”.

Así nació Kushki, y al ser ecuatorianos los fundadores, la startup arrancó en Ecuador en 2017. Clavijo cuenta que, previamente, cuando las otras compañías operaban y prestaban estos servicios, hacían un procesamiento cross border o externo, y Kushki empezó a ofrecer un procesamiento en la moneda local, sin necesidad de que sus clientes tuvieran una sociedad o un banco aliado.

Luego, ‘estratégicamente’ decidieron abrir Colombia en 2019: “Es cuando yo entro a ser parte de la compañía, cuando recién éramos cinco personas”: Castro, Schwarzkopf, Daniela Espinosa, José Santacruz y Melissa Castro, rememora Madeleine Clavijo. Por ello, al entrar en la configuración inicial, es reconocida como cofundadora.

Rememora que en ese tiempo en Colombia había ‘100’ pasarelas de pago, pero ninguna ofrecía esos servicios y Kushki rápidamente empezó a operar e incorporar nuevos medios de pago online que hasta ese momento no se podían utilizar.

Iteraciones y consolidación regional

“Lo que estamos ofreciendo hoy no es lo que estábamos ofreciendo hace un mes. Nuestra fábrica de desarrollo se dedica a innovar y hacer código todos los días”, cuenta.

Kushki arrancó con un solo servicio: el procesamiento, su core. Luego agregó diversos medios de pago además de las tradicionales tarjetas de crédito y débito, como el transfer, y abrió más países. “Esa ha sido la evolución, primero ir abriendo mercados, ir expandiendo nuestro servicio y añadiendo nuevas soluciones”.

Así, además de la recaudación, ahora dispersan a proveedores o usuarios de sus clientes y hacen logística inversa en el e-commerce, cuando no llega el producto y necesitan devolverle o retornar el pago al cliente, por lo que no sólo hacen Pay in, sino también Pay out.

“Nos especializamos en nuestro negocio exclusivamente de pagos y por eso hoy tenemos toda la cadena de valor: desde una transacción, podemos prestar un servicio de gateway, somos procesadores, adquirentes y agregadores”, cuenta.

“Kushki es la única compañía en Latinoamérica con una API de conexión regional, el único adquirente no bancario en la región que es capaz de conectar desde México a Chile todos los países con una sola integración para el cliente”, sentencia. 

Ecosistema de pagos digitales en América Latina

“Hay en América Latina más de 2 mil 700 empresas Fintech y el ecosistema superó los 350 millones de dólares en 2022”, asegura Clavijo, quien también es representante de Colombia en la Red Iberoamericana Fintech.

Además dice que, según cifras del último informe del Banco Interamericano de Desarrollo, hay países como México, Brasil, Chile, Colombia y Perú, en donde más del 15 por ciento de las transacciones fueron a través de medios de pagos digitales, lo cual, según Clavijo, ‘nos pone a la par con Estados Unidos’.

“Necesitamos de la participación y de la cooperación de todos, porque al final se trata de que podamos conjuntamente, Paytechs, Fintechs, bancos, adquirientes no bancarios, jugadores tradicionales, no tradicionales, cooperar para seguir construyendo y transformando el ecosistema”, declara.

Y enseguida señala que una Fintech siempre va a requerir aliados como los bancos, pero también viceversa: “En varios países somos aliados de los bancos, justamente para que ellos presten servicios digitales en algunos de sus canales”.  

Tendencias de pagos digitales

“Este año, por primera vez en la historia, el efectivo no va a ser el primer método de pago”, expone Clavijo el principal resultado del estudio Tendencias de pagos digitales en Latinoamérica 2023 que Kushki realizó junto con America’s Market Intelligence.

“El efectivo ha tenido una disminución de 36 por ciento en el último año y los pagos con tarjetas han venido tomando una predominancia en todos los países de la región. Hoy representan 50 por ciento de los pagos en el e-commerce y 20 por ciento en los puntos de venta”, dice.

Además del declive del efectivo, las cuatro principales tendencias que identificó el estudio fueron: 1) la interoperabilidad, 2) la tecnología sin contacto —la penetración de los pagos contactless en la región es de 35 por ciento—, 3) el éxito de Pix en Brasil y 4) los pagos peer to peer (P2P).

“Necesitamos que haya apertura de redes, para que las transacciones fluyan más rápido, el ecosistema crezca más y podamos entregar mejores opciones al mercado”, comenta. “En la medida que las empresas ofrecen más alternativas, el usuario, el consumidor, tiene mejores opciones de pagos más ágiles, seguros, cómodos e instantáneos y opciones que le faciliten la vida”, concluye.

Trabajar de la mano de los reguladores en la región

En 2022, Kushki obtuvo la licencia como adquiriente no bancario por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) de México, con la que ha operado desde hace un año.

Además, la empresa ha crecido por la vía inorgánica en el país: en 2022 adquirió la startup de aceptación de pagos con tarjeta Billpocket, fundada por Alejandro Guízar en Guadalajara en 2012, para consolidar su posición en el ecosistema de pagos y expandirlo a toda la región; “incrementar nuestra operación y ya pasar de ser sólo mundo online también a ofrecer servicios offline y seguir aumentando nuestras ofertas de productos y servicios”, según cuenta Clavijo. 

Agrega que en Perú, Colombia y, más recientemente en Chile, Kushki también tiene la licencia de adquiriente no bancario y está explorando los siguientes países. “Siempre hemos buscado trabajar de la mano con el regulador, no sólo para aportar nuestro conocimiento y experiencia, sino también para transmitir las necesidades del mercado y de la industria”, comenta.

Por ello celebra la apertura que han tenido los gobiernos de México y Colombia: “En todos los países donde operamos hemos sentido no solamente el apoyo, sino también la escucha para poder seguir avanzando y trabajando en este largo camino de la innovación”, señala.

Impacto de la industria

Clavijo expone que como “empresarios y líderes de cada uno de los países debemos trabajar justamente por impulsar el desarrollo de las economías de nuestros países”.

“Yo creo firmemente que el desarrollo y el sostenimiento de las economías están en manos de los emprendedores, de esas personas que todos los días están luchando por hacer cosas disruptivas y abrirse un lugar en el mercado”, dice Clavijo, quien cuenta que también, desde la Junta Directiva de Colombia Fintech, de la que es la presidenta, están impulsado la generación de nuevos emprendimientos, sobre todo liderados por mujeres.

Y cuenta que recientemente lanzaron una vertical dedicada exclusivamente a trabajar por la inclusión y equidad de género de la industria, “que históricamente ha sido liderada por hombres, pero en donde hemos visto que las mujeres estamos tomando mucha relevancia. De hecho, en México está Marlene Garayzar, que Stori también es un unicornio. Tenemos varios unicornios en Latinoamérica creados o cofundados por mujeres y yo creo que debemos seguirle apostando a eso”.

Según el último informe del BID, en América Latina sólo 40 por ciento de las mujeres tiene una cuenta bancaria, el 11 por ciento ahorra y el 10 por ciento dispone de un crédito”.

“Nos falta mucho por trabajar, hemos venido evolucionando, pero tenemos las ganas, podemos hacerlo. Tenemos las empresas, el talento y el talante para hacerlo. Los fondos, aunque sí se han retraído, siguen poniendo gran parte de sus inversiones y su atención en Latinoamérica. Tenemos que seguir aprovechando ese momento”, exhorta finalmente Clavijo, quien también es miembro del Comité de Inversiones del fondo de VC de capital semilla Latin Leap.

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Hoy Kushki tiene más de mil colaboradores en cinco países: Ecuador, Colombia, México, Perú y Chile. “A nosotros en Kushki nos falta todavía un camino largo por recorrer, porque queremos todavía llegar a más países incursionar en otras industrias también”, concluye esperanzada.