La espera terminó para cinco cableoperadores de Uruguay: el Poder Ejecutivo los habilitó a prestar Internet, poniendo fin al monopolio que la estatal Administración Nacional de Telecomunicaciones (Antel) tenía en el servicio. “La decisión promueve la competencia”, dijo la titular de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec), Mercedes Aramendía. Hay 1.1 millones de abonados a Internet en Uruguay, con una penetración del servicio cercana al 80 por ciento.
En concreto, se otorgó licencia de telecomunicaciones para la transmisión de datos y telefonía a las empresas Korfield, Praimar, Montecable, Nuevo Siglo y TCC luego de que la Corte Suprema aceptara el reclamo de los prestadores, los cuales presentaron una acción de inconstitucionalidad contra el artículo 56 de la Ley de Medios. Ese artículo es el que habla de “incompatibilidad” en que prestadores de TV brinden los otros servicios fijos.
Al listado de autorizados podría sumarse pronto Canelones Cable Visión Color, que también cuenta con una sentencia favorable de la Justicia.
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La titular del regulador agregó que se analiza en el Parlamento y en la Rendición de Cuentas la posibilidad de derogar de forma específica esta prohibición, un punto que ha sido de recurrente debate en instancias previas, pero que al momento no se ha pasado al papel. De hecho, el legislador Sebastián Cal presentó recientemente un proyecto para que proveedores de TV puedan dar Internet, aunque sólo aquellos con pisada regional -excluyó a DirecTV y Claro.
La postura de CUTA
“Esta autorización es para tres empresas de Montevideo y dos del interior, no es para el universo de los cableros del Uruguay”, subrayó Washington Melo, presidente de la Cámara Uruguaya de Televisión por Abonados (CUTA), en diálogo con DPL News. Tras conocerse la decisión, el ejecutivo sostuvo que otras empresas también pidieron la inconstitucionalidad, pero no corrieron la misma suerte por aspectos de forma en sus presentaciones.
Ante esta situación, Melo indicó que la entidad toma la novedad con dualidad: “Por un lado tenemos mucha alegría, porque se empezó a hacer justicia permitiendo que los cableros uruguayos puedan dar Internet, como sucede en el resto del mundo, y, por otro, tristeza, porque ya hace más de dos años que este gobierno nos prometió que podríamos dar Internet”, algo que en la práctica todavía no sucede. CUTA reúne a 81 cableoperadores de Uruguay.
En una suerte de repaso, el ejecutivo indicó que la promesa estuvo muchas veces cerca de ser cumplida durante esta administración: en un artículo de la Rendición de Cuentas pasada, que finalmente no apareció en el texto final, en el proyecto de nueva Ley de Medios que estuvo a punto de aprobarse y con la propuesta del diputado Cal. Incluso, en la discusión sobre este último, “hubo consenso de los distintos partidos” en apoyar el pedido de los cableros.
“En los últimos años, los números de Ursec demuestran una baja considerable en el número de abonados de TV paga”, sostuvo con razones Melo. Es que en 2017 Uruguay contaba con 722 mil suscriptores y la cifra cayó a 607 mil en 2021, una baja superior al 13 por ciento. En este contexto, y con la mayor competencia de la mano de plataformas OTT, los prestadores buscarán luz verde por todos los medios: “Esperamos la decisión política pero, ante la demora, también reactivamos el pedido vía judicial”, concluyó.