Brasil ya tiene frecuencia disponible para redes privadas, que pueden ser solicitadas por operadores o industrias de telecomunicaciones, pero este tipo de servicio aún no ha despegado. Para Vinicius Caram, superintendente de Otorgamiento y Recursos para la Provisión de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), faltan integradores para “entregar la solución de punta a punta: desde el dispositivo, conectividad, procesamiento de datos y entrega al cliente”.
Caram habló sobre el tema durante el evento IoT y redes privadas, organizado por Tele.Síntese. Explicó que las redes privadas ya son utilizadas por los principales actores, como Vale, Bosch y Petrobras, “pero si vas a miles de pequeñas y medianas empresas en Brasil, alguien necesita capacitarlas sobre los potenciales de la mejor solución.
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Justificó que las empresas más pequeñas no son conscientes de los beneficios de tener un WiFi personalizado, por ejemplo. “Necesitamos a alguien que llegue a las pequeñas y medianas empresas y les explique el potencial de las soluciones integrales para la red privada”.
El comentario fue reforzado por Luciano Saboia, gerente de Investigación y Consultoría de Telecomunicaciones de IDC Brasil. “Hasta hoy hemos tenido la conectividad anclada en los operadores, y este abanico de redes privadas y tecnologías abren la posibilidad de que otros agentes brinden la red y el servicio de conectividad, pero no funciona sin que todos los elementos del ecosistema converjan”, dijo Saboia.
Explicó que el ecosistema pasa por dispositivos, software, aplicaciones, desarrollo de aplicaciones, integración de servicios y redes, conocimiento profundo de las verticales –distintas necesidades en manufactura, educación, salud, transporte, entre otros–, equipamientos y operadores.
“La crítica que más escuchamos cuando hablamos con los CIO es ‘no hay ecosistema con todos estos ecosistemas capaces de integrar esta solución en cualquier área de Brasil”, dijo.
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Respecto al equipamiento, Caram también destacó que el precio es una barrera. “De nada sirve que una empresa use una solución, otra WiFi y otra 5G, porque crea nichos que no dan ganancias de escala. ¿Cuál es la mejor opción? Cada aplicación tiene sus necesidades, pero escalar es el primer paso”.
Por lo tanto, los agentes que presentan las posibilidades de las redes privadas a los nuevos jugadores son importantes.
Desafíos
Francisco Soares, subdirector del Grupo Sectorial de Telecomunicaciones de Abinee, también estuvo presente en el evento y habló sobre otro desafío que enfrenta Brasil: la regulación.
“La flexibilidad para la interconexión [de la red privada] con la red pública es un dato importante para motivar el interés en el desarrollo de la red pública, y eso no está claro”, comentó. Soares también recordó que la Consulta Pública N° 41, actualmente vigente, trata el tema.
La buena noticia es que Brasil está a la vanguardia en términos de disponibilidad de espectro y los desafíos son parte del tiempo de maduración de las discusiones técnicas y regulatorias, que sucede con cualquier tecnología, concluyó Diego Aguiar, director de Operaciones de Telefónica Tech.