Esta semana, desde México, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) hizo un llamado a normar la neurotecnología.
“La neurotecnología es un ámbito de preocupación; no está reglamentada como debería”, advirtió Gabriela Ramos, directora General Adjunta de Ciencias Sociales y Humanas de la Unesco. “Requerimos normar, para que preserve la dignidad de los seres humanos, resolver problemas y que no nos genere más”, agregó.
En la presentación del Informe de la Unesco, Revelando el panorama de la neurotecnología: avances científicos, innovaciones y principales tendencias, realizada en la sede de la ONU en México, Ramos enfatizó que su uso debe estar totalmente codificado y los países deben elegir si quieren utilizar los datos neurales.
“Esto es una invasión a la integridad más importante de la persona. El cerebro es nuestra integridad y lo que define nuestra identidad. Yo creo que debe estar normado. La tecnología tiene que gobernarse de una manera que le sirva a los seres humanos”, enfatizó.
Crecimiento exponencial de la inversión e investigación
Ramos expuso que la neurotecnología está evolucionando nuestra comprensión del cerebro y su crecimiento es exponencial, lo cual se constata con el aumento inusitado de inversiones, investigaciones, publicaciones y patentes en la materia.
Agregó que la inversión privada es mucho más alta, pues se multiplicó 22 veces en una década, con 7.3 mil millones de dólares de crecimiento y 33.2 mil millones de inversiones acumuladas. Haría un llamado para que las empresas inviertan también, porque en América Latina las empresas privadas no invierten.
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En cuanto a la academia, Ramos expuso que las publicaciones de neurociencia aumentaron 35 veces: desde el año 2000 se triplicaron hasta sumar 90 mil publicaciones al mes. La directora hizo hincapié en la necesidad de entender cómo funcionan esas tecnologías y el mercado antes de implementarlas.
No obstante este auge, advirtió que la ciencia no beneficia a todos por igual y no se produce en todos los países de manera igualitaria, pues Estados Unidos lidera con 40 por ciento de las publicaciones.
“Tenemos que actuar urgentemente”, señaló Ramos, ante el avance digital, y expuso como señal de alarma el hecho de que la tecnología computacional representa dos tercios de la investigación y la tecnología médica tan sólo un tercio. Resaltó su vínculo con la aplicación práctica, que se ve materializada en las patentes triádicas y exhortó a que el conocimiento se traduzca en innovaciones.
La neurotecnología es un tema de vanguardia, por la inversión, conocimiento y la investigación, y tiene una repercusión muy fuerte, señaló, por su parte, Andrés Morales. En su primera presentación pública como director de la Oficina de la Unesco en México, destacó que contar con un marco global ético le ayudaría a los países, a la industria y a la ciudadanía a tener bases para utilizar la neurotecnología de mejor manera.
Regulación de la neurotecnología
El director General del Instituto Nacional de Neurología de México, Ángel Arauz Góngora, destacó que, por ahora Chile es el único país que reconoce los neuroderechos. Por ello, dijo que es necesario retomarlos y empezar a trabajar con ellos en México.
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Arauz expuso que la neurotecnología puede ayudar a mejorar la vida, pero también puede vulnerarla, ya que puede desarrollar tecnologías que invadan nuestro cerebro. Entre sus bondades, el neurólogo señaló que puede rehabilitar criminales y explicó que, por ahora, la empresa de Elon Musk, Neuralink, se ha enfocado en que una persona con daño en la médula pueda volver a caminar.
Finalmente, Gabriela Ramos expuso que, con base en su mandato ético, la Unesco seguirá liderando el avance del marco normativo de la neurotecnología, como ya lo ha hecho con la Inteligencia Artificial. “Los países miembros ya tenemos la base, la semilla para avanzar en nuestro deber con los gobiernos”, declaró, y especificó que se encuentra en el párrafo 126, que aboga por los derechos, la integridad y aquellas cuestiones éticas relacionadas con los sistemas basados en las neurotecnologías y las interfaces cerebro ordenador.