Las plataformas de redes sociales, sitios web, aplicaciones y otros servicios digitales tendrán más responsabilidades para eliminar y limitar los contenidos ilegales o dañinos en Internet, según informó el gobierno del Reino Unido en un comunicado.
Las nuevas reglas para las plataformas tecnológicas establecen que deberán esforzarse más por abordar contenidos como el abuso sexual infantil, material terrorista y el contenido suicida. También incluye el contenido que es legal pero que puede causar un daño significativo a adultos, como la desinformación sobre las vacunas contra el nuevo coronavirus.
Para hacer cumplir las nuevas reglas, el gobierno asignó a la Oficina de Comunicaciones (Ofcom) como el nuevo regulador para vigilar el contenido dañino en línea y proteger a los niños o personas vulnerables de los riesgos de Internet.
Las empresas que no protejan a sus usuarios de contenido ilegal enfrentarán multas de hasta el 10 por ciento de su facturación o el bloqueo de sus plataformas. Además, el gobierno considerará a los altos directivos de las empresas como los responsables de los daños.