7 alternativas para eliminar barreras a la compartición de infraestructura en Colombia
Ante la existencia de barreras para la compartición de infraestructura que soporte el despliegue de las redes de telecomunicaciones, la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) de Colombia está estudiando alternativas regulatorias que ayuden a resolver la problemática.
El órgano regulador publicó un proyecto en el que plantea las posibles formas en las que podría intervenir en siete áreas relacionadas con la compartición de infraestructura propia del sector de telecomunicaciones y de otros sectores, como el eléctrico.
- Sectores aún no regulados
La infraestructura de otros sectores, como los ductos, torres y cables, también es susceptible de ser aprovechada para las redes que brindan conectividad a la población.
Sin embargo, todavía no existe un marco normativo que habilite la compartición en algunos sectores. Por eso, la CRC señala que se podría definir un marco de condiciones para facilitar los acuerdos entre las partes, sin o con regulación tarifaria.
- Sectores actualmente regulados
Otro de los campos que está examinando la CRC es el de los sectores donde la compartición de infraestructura ya está regulada, como el eléctrico y el de telecomunicaciones. Aquí se identifican otros problemas: las diferencias entre los regímenes de acceso propicia que las empresas prefieran desplegar sus redes en la infraestructura eléctrica, por ser menos costosa.
En ese sentido, la Comisión está analizando si es conveniente cambiar las reglas de topes tarifarios y contraprestaciones tarifarias en el ámbito de las telecomunicaciones, con el fin de reducir las brechas respecto al sector eléctrico y establecer precios más eficientes.
- Falta de información y transparencia
La CRC advierte que otra de las barreras para la compartición tiene que ver con la falta de transparencia e información acerca de las condiciones técnicas, económicas y jurídicas de acceso a la infraestructura, las ofertas comerciales y la disponibilidad de acceso a diferentes elementos como ductos, postes o torres.
Si no se cuenta con un marco de referencia claro, las negociaciones de compartición entre las distintas compañías serán más difíciles y surgirán conflictos. Por esa razón, el organismo resalta la importancia de publicar y mantener actualizada una oferta comercial básica que abarque todas las condiciones para la compartición y arrendamiento.
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- Lenta respuesta a las solicitudes de acceso
El estudio de la Comisión de Regulación de Comunicaciones identifica que los tiempos de las respuestas a las solicitudes de acceso a la infraestructura, y su respectiva respuesta de autorización o negativa, pueden ser muy largos y demorar la implementación de las redes de telecomunicaciones.
Actualmente, los proveedores de infraestructura cuentan con un plazo de 30 días calendario para contestar a una solicitud de acceso, la cual sólo podrá ser negada si existen restricciones técnicas o de disponibilidad. La CRC piensa que esto podría ser suficiente para agilizar los procedimientos.
Sin embargo, también analiza la posibilidad de establecer otro plazo máximo de 10 días para requerir ajustes o complementos en caso de que las peticiones de acceso estén incompletas, de modo que los trámites no se prolonguen indefinidamente.
- Tarifas en el sector eléctrico
Las redes de telecomunicaciones ya utilizan parte de la infraestructura del sector eléctrico para ampliar su alcance, pero se presentan discrepancias al momento de definir tarifas de remuneración. Las empresas de electricidad se han quejado de que los operadores de comunicaciones realizan instalaciones por ductos no autorizados, pagando menos de lo que deben.
Para solucionar ese problema, la CRC plantea que se podría establecer un tope tarifario único para remunerar un punto de apoyo en canalizaciones del sector eléctrico, independientemente de los ductos que haya en compartición; mantener dos tarifas diferentes pero fijar una condición para acceder a un segundo ducto cuando haya insuficiente capacidad técnica; o no intervenir y vigilar los posibles incumplimientos.
- Definición de los puntos de apoyo
Además, el órgano regulador estudia la posibilidad de actualizar la descripción de lo que se considera como punto de apoyo en la infraestructura eléctrica. Hasta ahora, sólo se contemplan como tales los cables o conjunto de cables para tendidos aéreos y subterráneos. En el futuro, podría especificarse que estos cables deben agruparse únicamente en las cámaras de paso, para evitar desorden en el despliegue.
- Homologación de condiciones
Por último, el informe de la CRC señala que una de las grandes barreras a la compartición es que existen diferentes marcos regulatorios para el acceso a la infraestructura entre el sector de telecomunicaciones y el eléctrico.
Una posible solución sería homologar la mayor cantidad de condiciones de acceso a los sectores ya regulados por la CRC, o incluso reunir en un solo cuerpo los lineamientos y las reglas comunes de compartición, lo cual facilitaría su entendimiento y cumplimiento.
Los obstáculos a la compartición dificultan la capacidad de los operadores para reducir los costos de los servicios ofrecidos a los usuarios finales, como la telefonía o el Internet; impiden la expansión de la cobertura de las telecomunicaciones y el despliegue de nuevas tecnologías, y mantienen en desaprovechamiento la valiosa infraestructura de diversos sectores.
Con eso en mente, la CRC busca encontrar las mejores alternativas que propicien el uso compartido de la infraestructura y brinden incentivos a las inversiones. Hasta el 25 de abril, la institución recibirá comentarios a su estudio y, posteriormente, prevé hacer cambios a la normativa actual.