La Junta de directivos de la red social Twitter está considerando darle acceso total a Elon Musk de todo el flujo de datos de la plataforma, que comprende un enorme tesoro de más de 500 millones de tuits publicados diariamente, con el fin de que el trato de adquisición por 44 mil millones de dólares (USD) siga su curso.
El flujo de datos masivo de Twitter comprende un registro en tiempo real de todo lo que ocurre en la red social, incluyendo información sobre el contenido, la marca de tiempo y desde qué dispositivo se publicó.
Estos datos han estado disponibles durante años para un puñado de empresas que pagan dinero por la capacidad de analizar la información y detectar patrones en la conversación diaria.
La información podría llegar a las manos del señor Musk antes de que termine la presente semana, según fuentes anónimas que informaron al Washington Post. Un portavoz de Twitter declaró al medio que la compañía seguirá compartiendo datos de manera cooperativa con Musk, para consumar la transacción y cumplir con los términos acordados.
La decisión de compartir el flujo de datos llega un par de días después de que el también director de Tesla y SpaceX amenazó con retirar su oferta de adquisición, luego de que Twitter se negara a compartir la información sobre la metodología que usa para contabilizar las cuentas falsas y el spam.
Twitter ha repetido hasta el cansancio que los bots y las cuentas falsas representan sólo el 5 por ciento del total de usuarios en la red social. Sin embargo, algunos investigadores externos aseguran que este porcentaje puede ser hasta tres veces más alto.
Por su parte, Elon Musk también considera que el problema de los bots es mucho más grande de lo que Twitter está dispuesto a admitir. Para Musk, conocer la cantidad de bots y cuentas falsas reales es importante para determinar la capacidad de monetizar la plataforma a través de anuncios.
¿Los bots son un pretexto?
La demora en la entrega de datos ha sido el pretexto perfecto para que el hombre más rico del mundo pusiera en pausa el proceso de compra, lo que ha provocado incertidumbre sobre sus intenciones para completar el trato.
Algunos analistas como Kurt Wagner, de Bloomberg, consideran que el flujo de datos masivo de Twitter podría no responder las preguntas de Musk, porque no contiene detalles específicos como una dirección IP o un número de teléfono, que podrían ser útiles para determinar si un tuit lo publicó un humano o una computadora.
También se dice que es probable que Elon Musk sólo esté utilizando como excusa el tema de las cuentas falsas para intentar renegociar a un menor precio, a medida que las acciones de las empresas de tecnología se encuentran en una tendencia a la baja.
Aun así, el tema de los bots en Twitter no sólo despierta inquietud en el magnate, sino también en los accionistas de la empresa. De acuerdo con Bloomberg, esta semana John Solak, propietario de cinco acciones de Twitter, demandó a la compañía para que un juez obligue a la plataforma a entregar archivos internos sobre el tema.
Más allá de que el melodrama entre Twitter y Musk se concrete, la red social continúa preparándose internamente para alcanzar una meta ambiciosa: aumentar los usuarios diarios monetizables a 13 millones en el trimestre que viene, según informes de Reuters.
Aunque los ánimos de crecimiento son fuertes, el sentimiento de los empleados sigue siendo bajo, ya que la posibilidad de continuar con la política de trabajo remoto permanente podría desaparecer bajo el mando de Musk, quien ha compartido su visión en contra del teletrabajo para los empleados de Tesla.
