A propósito de los recientes sismos ocurridos en México, ¿se imaginan que no pudieran escuchar la alerta sísmica porque son sordos?
Hace pocos días conocí a Ellie a través de Twitter. Ella es una persona con discapacidad auditiva que irradia alegría y me parece un gran ejemplo de vida para todos, por lo que no dudé en entrevistarla para conocer su historia, y que publiqué en el sitio de Once Noticias Digital.
El pasado 19 de septiembre de 2022, cuando ocurrió un nuevo terremoto en diversas zonas del país, incluida la Ciudad de México, Ellie envió un mensaje en Twitter en el que decía que por favor le mandaran un mensaje, ya que ella no puede escuchar la alerta sísmica.
Muchas personas le contestamos que descargara alguna de las apps de alerta sísmica en su teléfono, pero claro, algunos no pensaron en que muchas de esas apps también funcionan sólo a través de la emisión de un sonido. Hay otras que al tratarse de una alerta de sismo, enciende un flash, pero muchas no están pensadas justo para personas con alguna discapacidad auditiva.
Cuento la historia de Ellie, porque esta semana en el foro México 5G, organizado por DPL Live, en el que se habló de transformación digital, retos, necesidades, plataformas digitales, regulación, beneficios, etcétera, la comisionada del INFOCDMX, Marina San Martín, tocó el tema en su participación, y también en una charla que tuvimos, de la necesidad de democratizar la tecnología y que esta también pueda ser utilizada por personas con discapacidad, adultos mayores y todos los grupos vulnerables.
La comisionada San Martín tiene toda la razón. En nuestra charla decía que urge también que los propios desarrolladores de aplicaciones piensen en integrar a sus apps a las personas con discapacidad, ya sea visual, auditiva, motriz o cualquiera.
Y es que acuerdo con el estudio de Naciones Unidas “Perspectivas de la población mundial 2019”, en 2050, una de cada seis personas en el mundo tendrá más de 65 años, mientras que actualmente el promedio es una de cada 11. Es decir, habrá muchos más adultos mayores que hoy en día.
No significa que algunos desarrolladores de tecnología no hayan pensado en ello, pero sin duda falta muchísimo. Hay fabricantes de teléfonos inteligentes que han puesto mayor atención en ello. Por ejemplo, con las opciones de accesibilidad como lectura de textos por voz, aumento del tamaño de las fuentes e imágenes de la pantalla, entre muchas otras.
En resumen, lo anterior se le llama inclusión digital, una frase que sin duda debemos tener más presente en nuestro vocabulario los ciudadanos, empresas, tomadores de decisiones, gobiernos y sociedad en general.
Por ahora, me quedo con lo que me dijo la comisionada del INFOCDMX, Marina San Martín, sobre el tema, porque pensamos que la inclusión digital es sólo para las personas con alguna discapacidad, pero no es así, es para todos:
“Hay que considerar estos dispositivos o herramientas que a veces se nos olvida que alguien no puede usar. Por ejemplo, el captcha; las personas que son invidentes no pueden distinguir las imágenes y siempre lo tenemos como un pre candado para entrar, y se nos olvida que alguien no podrá ocuparlas. Este tipo de cosas son como el tema de las rampas pero en lo digital, todo el mundo las vamos a poder ocupar, es una especie de herramientas universales en ese tema de inclusión que se va a enfocar en alguien, pero al final todos ganamos con ese tema”.
