El ministro de Comunicaciones Juscelino Filho añadió un párrafo más a la Ordenanza 1.924/SEI-MCOM, el cual exige el cumplimiento de los requisitos mínimos de seguridad para la red privada del gobierno, como la criptografía.
La ordenanza trata de las directrices para la subasta y uso de las bandas de 700 MHz, 2,3 GHz, 3,5 GHz y 26 GHz en redes de comunicación de manera que no interfieran con la señal de TV abierta transmitida por antenas parabólicas en la banda C satelital, y establece la obligación de la implementación de la red privada.
También asigna a la Anatel la administración, fiscalización y análisis de diversos requisitos. Con el nuevo párrafo, la agencia reguladora también queda encargada de definir los requisitos de seguridad de la red privada que servirá para la seguridad pública y otras funciones críticas.
En la época de la publicación, en enero de 2021, el ministro era Fábio Faria, quien llegó a declarar que incluiría algunos requisitos específicos en las directrices de la red privada, de forma que los proveedores no pudieran estar vinculados a partidos políticos. Sin embargo, ni la ordenanza ni las alteraciones actuales incluyen tales restricciones.
En 2020, inspirado en el gobierno de Trump en Estados Unidos, el expresidente Jair Bolsonaro, admirador del exmandatario estadounidense, llegó a considerar vetos a las empresas chinas, pero en la subasta del 5G en noviembre de 2021, permitió la participación de Huawei, empresa que siempre ha estado envuelta en acusaciones de vínculos con el gobierno chino, enfrentando diversas prohibiciones alrededor del mundo.
En aquella época, los operadores llegaron a afirmar que una subasta sin Huawei podría hacer inviable la implantación del 5G en Brasil, ya que es uno de los principales proveedores de infraestructura de telecomunicaciones del país, con casi la mitad de las torres.