El gigante tecnológico chino Xiaomi anunció que, como parte de su estrategia de despliegue 5G, logró reanudar 80 por ciento de las operaciones de su cadena de suministro, previo al lanzamiento comercial de su primer smartphone 5G, el Redmi K30 Pro.
Después de algunas semanas de inactividad en varias de sus plantas en China, por el brote de COVID-19, Xiaomi señaló que febrero había sido un mes complicado, ya que sus fábricas y oficinas tenían problemas con varios requisitos para reanudar las operaciones.
Pese a las restricciones por el virus, Wang Xiang, presidente de Xiaomi, ha expresado su confianza por que los mercados nacionales y globales se recuperen. “No hemos cambiado nuestra estrategia de lanzamiento de productos 5G, y esperamos que al menos 10 nuevos modelos de teléfonos inteligentes 5G lleguen al mercado este año”, señaló.
Xiang también informó que la compañía ha logrado reabrir más de mil tiendas en China.
De acuerdo con datos de la Academia de Tecnología de Información y Comunicaciones de China (CAICT), durante el mes de febrero, que marcó el punto más alto en la contingencia, las marcas de teléfonos móviles vendieron un total de 6.34 millones de dispositivos en China, un 54.7 por ciento menos que los 14 millones logrados en febrero de 2019.