La Autoridad de Competencia y Mercados (CMA) del Reino Unido inició la fase 2 de revisión de la fusión de Virgin y O2.
Por medio de una solicitud de las empresas, esta etapa será a través de un proceso de “vía rápida”, ya que hay pruebas suficientes para la investigación para que el regulador concluya que existe una perspectiva realista de que la transacción resultaría en una disminución sustancial de la competencia en uno o más mercados.
La opción de vía rápida proporciona flexibilidad en el proceso de la CMA y permite que estos casos progresen de manera eficiente y rápida.
“La CMA ha aceptado hoy esta solicitud dado el impacto potencial del acuerdo sobre la competencia en varios mercados de telecomunicaciones en el Reino Unido, y la investigación de la Fase 2 comenzará de inmediato”, explicó el ente en un comunicado. La Fase 2 será supervisada por un grupo de investigación elegido entre los miembros del panel independiente de la CMA.
Concretamente, a la CMA le preocupa que, tras la fusión, Virgin y O2 puedan tener un incentivo para subir los precios o reducir la calidad de los servicios mayoristas, lo que en última instancia conduce a un peor trato para los consumidores del Reino Unido.
En noviembre, la Comisión Europea (CE) decidió que era competencia de la CMA el análisis de la fusión de las filiales de Telefónica y Liberty Global.