Microsoft presentó un documento en donde responde a la demanda de la Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos que busca evitar la compra del editor de juegos Activision Blizzard. “La Comisión no puede demostrar que el acuerdo perjudique la competencia o a los consumidores”, apuntó la compañía en su presentación.
Microsoft insiste en que no tiene la intención de bloquear el acceso del popular juego Call of Duty a otras plataformas rivales de videojuegos, ya que no le conviene degradar la experiencia de juego ni afectar la reputación de Xbox haciéndolo. Además, menciona que mantener la amplia disponibilidad del juego en otras consolas es bueno para las finanzas de su negocio como para los jugadores.
“Xbox no puede darse el lujo de hacer exclusivos los juegos de Activision sin socavar su propia economía”, aseguró Microsoft. La compañía destacó que desde que anunció la adquisición les ofreció a sus competidores mantener el juego en sus consolas hasta por 10 años, propuesta que sólo Nintendo ha aceptado, mientras que Sony se sigue negando a negociar.
En el documento, Microsoft argumenta que la adquisición de un solo juego no puede cambiar una industria altamente competitiva y que el hecho de que Sony se niegue a aceptar la propuesta de Xbox no justifica que se prohíba la transacción.
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De acuerdo con la empresa, su objetivo al comprar Activision es ser más competitivo al aumentar su presencia en la industria emergente de juegos móviles. Asimismo, señala que para Xbox es un buen negocio hacer más accesibles los juegos de Activision colocándolos en más plataformas y vendiéndolos a precios más asequibles.
La tecnológica también negó las acusaciones de la FTC sobre engañar a los reguladores europeos de convertir algunos juegos en exclusivos de Xbox luego de comprar ZeniMax en 2020.
“Cualquier sugerencia de que las declaraciones de Microsoft a la Comisión Europea sobre ZeniMax fueron engañosas, es incorrecta. Microsoft dijo explícitamente que honraría los derechos de exclusividad existentes de Sony y abordaría la exclusividad para futuros títulos de juegos caso por caso, que es exactamente lo que ha hecho”.
Como conclusión, Microsoft comentó que la Comisión no tiene el conocimiento suficiente sobre cómo funciona la competitiva industria de los videojuegos y señaló que pareciera que está protegiendo a una de las compañías más grandes del mundo perdiendo de vista los principios rectores de las leyes antimonopolio.