Estados Unidos obtuvo pruebas contra Huawei, las cuales planea usar en el caso que acusa al proveedor chino de supresión de sanciones y fraude bancario.
Alex Solomon, asistente del abogado que lleva el caso, dijo en audiencia ante el tribunal federal de Brooklyn que la información obtenida bajo el Acta de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera de Estados Unidos (FISA, por sus siglas en inglés) requeriría un tratamiento clasificado.
El gobierno estadounidense notificó a Huawei su intención de usar la información, diciendo que fue “obtenida o derivada de la vigilancia electrónica y la búsqueda física”, pero no dio más detalles.
Brian Frey, ex fiscal federal, explicó que “la razón por la que se obtendría la vigilancia a través de la FISA es cuando se sospecha que alguien podría estar espiando en nombre de una potencia extranjera”.
Chasen Skinner, portavoz de la compañía china, se negó a comentar sobre el asunto asegurando que no comentan sobre los litigios pendientes.
El mes pasado, Reuters detalló cómo las autoridades estadounidenses rastrearon en secreto las actividades de Huawei, mediante la recopilación de información copiada de dispositivos electrónicos transportados por ejecutivos chinos a través de los aeropuertos.
Reuters fue quien dio a conocer la noticia de los cargos de fraude bancario en diciembre y reportó en febrero cómo un sondeo interno de HSBC ayudó a llegar a los cargos contra Huawei y Meng Wanzhou, la hija del fundador de la compañía.
La próxima fecha de corte en el caso de Brooklyn está fijada para el 19 de junio.