Comisión Europea, Reino Unido y EE. UU. acuerdan procurar competencia justa en Inteligencia Artificial
La Comisión Europea, Reino Unido y Estados Unidos acordaron trabajar en conjunto a favor de la competencia y la protección de los consumidores y empresas en el desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA).
El acuerdo nace de la premisa compartida de que “los mercados justos, abiertos y competitivos ayudarán a desbloquear oportunidades, y darán espacio al crecimiento e innovación que estas tecnologías puedan brindar”.
Firmaron la alianza Margrethe Vestager, vicepresidenta ejecutiva y comisaria de Competencia de la Comisión Europea; Sarah Cardell, directora ejecutiva de la Autoridad de Mercados y Competencia del Reino Unido; y de Estados Unidos, Jonathan Kanter, fiscal general adjunto del Departamento de Justicia, y Lina Khan, presidenta de la Comisión Federal de Comercio.
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Las partes dejaron claro que el llamado a trabajar juntos cuando así se requiera se da aún en contextos jurisdiccionales distintos y bajo entendimiento que las decisiones de los involucrados siempre serán soberanas e independientes.
El documento propone que los puntos de inflexión tecnológicos pueden introducir nuevas formas de competir, catalizando oportunidades, innovación y crecimiento, por lo que resulta necesario “trabajar para garantizar que el público aproveche todos los beneficios”.
Riesgos de competencia
A través de este acuerdo, se revisará el accionar de actores vinculados con IA en al menos tres niveles:
- Movimientos de control, por el riesgo de que haya compañías con alto poder en el mercado.
- Actividad de grandes compañías digitales, que podrían tener un mercado sustancial en múltiples niveles.
- Acuerdos que involucren a firmas del ecosistema, por la amenaza que podrían suponer para la competencia.
Las partes se dicen conscientes de otros riesgos que puedan surgir, como el vinculado con el uso de algoritmos para compartir información sensible, fijar precios o coludir en otros términos o estrategias comerciales. También estarán especialmente atentos a cualquier amenaza a la protección del consumidor que pueda derivarse del uso y aplicación de la IA.
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La revisión se dará bajo los principios de un acuerdo justo, se señala expresamente que “el ecosistema IA estará mejor cuanto más empresas participen de tratos justos”; interoperabilidad, entendiendo que cualquier afirmación de que la interoperabilidad requiere sacrificar seguridad será enfáticamente analizada, y elección, lo que significa examinar cualquier forma o mecanismo de empresas orientado a bloquear que empresas o individuos puedan elegir opciones libremente.
“La Inteligencia Artificial es una tecnología sin fronteras que tiene el potencial de impulsar la innovación y el crecimiento, generando beneficios transformadores para las personas, las empresas y las economías de todo el mundo. Es por eso que nos hemos reunido con nuestros socios de la Unión Europa y Estados Unidos para establecer nuestro compromiso de ayudar a garantizar que la competencia justa, abierta y efectiva en IA impulse el crecimiento y el cambio positivo para nuestras sociedades”, dijo Sarah Cardell.