Voa Noticias-Álvaro Algarra
Hace menos de 10 años, Venezuela era el país número uno, de América Latina, en penetración de servicios de telefonía fija, móvil e Internet. Hoy, según las cifras de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones, pasó a ser el último en telefonía móvil, ubicado entre los tres últimos en telefonía fija y también de los últimos, en Internet.
El ingeniero Henry Guaregua, ingeniero de la empresa estatal CANTV, que controla todas las telecomunicaciones en el país, le dijo a la Voz de América que “el mantenimiento preventivo y correctivo no existe en la CANTV, desde hace bastante tiempo; por lo tanto, estos equipos se han venido dañando con el tiempo, las licencias se han vencido aquí; por ejemplo, tú vienes a pedir cualquier cosa, una línea, hacer algo y no hay herramientas para cumplir esos requerimientos”.
“No hay equipo, no hay módem, no hay teléfonos, no hay nada… Tiene que ir de la mano la corrupción, con el descuido, la falta de inversión venezolana”, agregó.
Johan Chávez, ingeniero también de CANTV añadió que cuando eran una compañía del estado, eran una empresa de teléfonos, y cuando llegó la inversión extranjera, los convirtió en una empresa de telecomunicaciones, y han sufrido “un retraso de más 20 años… por falta de inversión, por una herencia mediocre… Somos el tercero más lento a nivel mundial”.
El ingeniero añadió que las centrales están cerradas; no hay insumos, sistema para atención, cambio de firmas, mudanzas, cambios de teléfonos. Estamos en la peor crisis que hay vivido la empresa”, puntualizó Chávez.
Por su parte, la presidenta de la comisión de medios de la Asamblea Nacional, María Beatriz Martínez, aseguró a la VOA que no se trata de un problema solo de conectividad o un problema técnico, sino que hace parte de una postura política.
“La realidad es que Venezuela atraviesa todas estas dificultades porque hay una postura política, que pretende silenciar y mantener una hegemonía comunicacional donde, sencilla y llanamente, el ciudadano no tenga derecho a la información”, dijo la diputada.
Habló sobre un informe que es importante porque forma parte de un trabajo que “puede dibujar claramente lo que es el bloqueo, la burbuja en la cual pretende mantenerse la información en Venezuela, y cómo se persigue y se bloquea la libertad de expresión en en su máxima capacidad”
Los venezolanos sufren el impacto de una conectividad que, hace algunos años, estuvo a la vanguardia, y que, actualmente, afecta severamente la posibilidad de conectarse a internet y recibir informaciones de importancia para su libertad y bienestar.
Es el caso de Sonia Ortíz, una venezolana afectada, que afirma que no hay inversión, revisión de los servicios ni plataformas y es complejo porque CANTV es una empresa de peso en el país.
“No podemos estar desarticulados de nada porque ahorita lo que está uniendo al mundo… se llaman las redes sociales. Venezuela es la que está más atrasada en este campo”.
Por su parte, Ledy, una ciudadana venezolana que solo quiso identificarse con su primer nombre, dice que no tiene servicio de comunicaciones desde febrero y, si solicita algún servicio, no hay sistema o debe esperar varios días para recibir respuesta. La mujer denunció a la VOA que, si consigue alguien para que le ayude a conectar la línea, le piden 80 dólares.
“No nos podemos comunicar con nadie, ni bancos ni la familia, ni hospitales… Estamos incomunicados y no nos han dado respuesta”, afirmó.
Sobre cómo se informan los venezolanos de lo que está pasando en su país, particularmente las denuncias de presuntas violaciones de Derechos Humanos, libertad de expresión y otras, el estudiante Walter Romero explicó que “es un poco difícil acceder a cualquier página de internet que se vincule a los derechos humanos, incluso aparecen como bloqueadas”.
El presidente venezolano en disputa, Nicolás Maduro, en contraposición, resaltó recientemente la vigencia de lo que llamó “la democratización de las comunicaciones en su país y las plenas libertades a lo largo y ancho de todo el territorio nacional”.