Urgen acelerar la transición energética con baterías, electrificación de vehículos y tecnologías verdes
En un mundo con temperaturas y heladas cada vez más extremas y una creciente demanda de energía limpia, México se posiciona como un laboratorio clave para las energías renovables.
Durante un panel de Digital Power, expertos de la industria energética destacaron la urgencia de avanzar en la transición energética, mediante la adopción de soluciones de almacenamiento inteligente, electrificación de transporte y regulaciones que incentiven la inversión privada. Las claves mencionadas fueron un enfoque estratégico en baterías, tecnología digital y generación de energía verde.
Liu Jiude, CEO de Huawei México, subrayó el papel estratégico de las energías limpias como un mercado de trillones de dólares. Destacó la infraestructura de energía digital y los vehículos eléctricos como motores de transformación.

En su oportunidad, Zhou Bo, director de Huawei Digital Power México, recordó que China lidera el desarrollo global en energías renovables, con 55 por ciento de la capacidad instalada a nivel mundial y un estimado de 45 millones de vehículos eléctricos para 2025.
Mencionó que Huawei se posiciona como un actor clave en la digitalización energética y la electrificación de la movilidad, combinando tecnologías electrónicas avanzadas con soluciones digitales innovadoras.

Potencial de la energía renovable en México
Nelson Delgado, director de la Asociación Mexicana de Energía Solar (ASOLMEX), destacó que México tiene una oportunidad única gracias a su potencial solar y eólico. Sin embargo, advirtió que 80 por ciento de la energía del país aún depende de combustibles fósiles, lo que compromete la soberanía energética.
Propuso que la red eléctrica integre sistemas de almacenamiento flexibles para afrontar el cambio climático y satisfacer los picos de consumo.
Por su parte, Francisco Armendariz, CEO de Corporativo Soles, describió México como un “laboratorio de generación renovable”, donde las baterías descongestionan las redes de transmisión, las cuales representan una tecnología confiable para el almacenamiento.
Complementando esta visión, Héctor Villalobos, de Bell Int., instó a superar el rezago regulatorio en baterías y sugirió el desarrollo de micro redes para maximizar el aprovechamiento de la energía renovable.
Regulación y adaptación
Raúl Talán, director General del Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE), señaló que el país carece de normas oficiales para sistemas fotovoltaicos y baterías, lo cual frena su adopción masiva.
Advirtió que el planeta ha superado los límites de los Acuerdos de París sobre cambio climático, por lo que sugirió un enfoque más pragmático basado en la adaptación climática. “Los campos solares deben incorporar baterías para asegurar el suministro durante los picos de demanda”, enfatizó.

Hacia un transporte eléctrico y sostenible
Antonio Perea, Partner Development Manager de Huawei Digital Power Latinoamérica, propuso implementar un alto impuesto al carbono y electrificar el transporte mediante soluciones de carga rápida, para reemplazar vehículos tradicionales por opciones sostenibles.
Estas medidas, combinadas con sistemas de almacenamiento de energía (BESS), podrían reducir los costos energéticos 50 por ciento y optimizar el consumo industrial.
A pesar de los desafíos y asignaturas pendientes en materia de energías renovables, los expertos coincidieron en mostrarse optimistas porque México puede consolidarse como un líder en energías limpias.
Con un potencial inmenso en energía solar y eólica, el país debe avanzar hacia una regulación más flexible, mayor inversión privada y adopción de tecnologías inteligentes para almacenamiento y generación renovable para garantizar una transición energética que equilibre sostenibilidad, seguridad y competitividad en el mercado global.
