Reconfiguración del sistema bancario mexicano en 3 actos

En una semana, el sistema bancario mexicano cambió por completo. A partir de ahora, ya nada volverá a ser igual. En tan sólo ocho días, ocurrió una serie de cambios estratégicos, reconfiguraciones y nuevos anuncios de licencia que anticipan un gran cambio, quizás sin precedentes, o al menos no en décadas, en el sistema bancario mexicano.

Primer acto: RappiCard

El martes 15 de abril, el Grupo Financiero Banorte le notificó a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) el evento relevante mediante el cual llegó a un acuerdo con Rappi para comprarle el 44.28% del capital social restante de Tarjetas del Futuro (TDF), la empresa conjunta mediante la que lanzaron RappiCard en México.

Segundo acto: bineo

El también martes 22 de abril, durante la conferencia de prensa por los resultados del primer trimestre, el director General del Grupo Financiero Banorte, Marcos Ramírez Miguel, confirmó lo que ya había adelantado El Economista: que el proyecto de bineo había sido descontinuado y ya no permitiría la adición de nuevos clientes. El propio directivo dijo que se hizo por un control de gastos, ya que habían realizado fuertes inversiones tanto en talento como en tecnología.

A inicios de 2024, al lanzar oficialmente bineo, Banorte comentó que había conformado un equipo de 200 personas sólo para el banco digital. Víctor Moya fue quien lideró el proyecto al interior del grupo financiero desde 2020, cuando Banorte comenzó su propia transformación financiera en tres pistas.

El CEO dijo que, como primer acto, Banorte se encuentra realizando un ‘acoplamiento’ de bineo, mientras analiza su posible venta a un tercero o fusión dentro del propio grupo financiero, con miras a tener la decisión final hacia el final del año.

La ejecución, casi en forma simultánea, de ambas acciones, se interpretó como que Banorte había optado por cerrar bineo para decantarse por completo por RappiCard en lo que denominó su ‘estrategia digital’ de ‘banca joven’. Ramírez señaló que aún no tenían definido el nombre o la identidad de esta nueva apuesta, aunque reconoció que Rappi era una nueva ‘avenida’ que había llegado a su autopista.

La penetración entre ambos productos —aunque en realidad no tienen parangón, ya que son entidades muy disímiles: TDF es una SAPI que ofrece una TDC; mientras que bineo es una institución de banca múltiple que podía ofrecer todos los productos que le permitía la licencia del sistema financiero medicano— fue completamente distinta: en el poco más de un año que estuvo activo, bineo acumuló 52 mil clientes, mientras que RappiCard registró 1.14 millones en sus primeros tres años de operación, al cierre de 2024. Una vez más, son distintos: aquellos, de débito y estos, de crédito. Mientras que bineo emitió sólo 92 tarjetas de crédito en una prueba con amigos y familiares, según explicaron sus directivos durante la conferencia trimestral.

Eso sí, lo que dijeron sus directivos respecto a que querían ‘retarse’ y demostrar que podían ser los primeros en lanzar un banco con licencia de institución de banca múltiple propia construido desde cero, sí lo consiguieron. Le ganaron a Revolut, a Plata, Mercado Pago y el propio Nu. También es cierto que, en 2020, cuando empezaron este viaje, el panorama en México era muy distinto: Nu apenas estaba lanzando, Stori y Klar acababan de ser fundadas el año previo y recién debutaban en el mercado; mientras que Ualá también recién estaba aterrizando en el país hacia el final del año. Ninguno de los jugadores de tecnología financiera hablaba aún de licencias bancarias, o al menos no públicamente.

Aún no se ponía de moda la adquisición de sociedades financieras populares (sofipos) para crecerlas exponencialmente a través de la digitalización y su posterior conversión en bancos, entre las que Nu fue la primera en salir airosa.

Tercer acto: Nu

El jueves 24 de abril, Nu México confirmó que recibió el oficio de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) en el que le notificó la autorización de su solicitud de licencia bancaria. Esa misma tarde, la compañía organizó de manera exprés una conferencia de prensa en la que la directora jurídica, Romina Benvenuti, señaló que por ahora nada cambiaría y seguirían operando como sofipo hasta obtener la autorización del inicio de operaciones; mientras que el director general, Iván Canales, adelantó que se enfocarían en el producto de nómina, ya que la abrumadora mayoría (90%) del mercado está concentrada en sólo cinco bancos.

Si bien es cierto que los ejecutivos advirtieron que no dependía de ellos determinar cuándo podrían obtener la siguiente autorización, en el Día de Contenido del Endeavor Cracks Summit, realizado en Nu México, Claudia Alva, directora de Producto y Tecnología, me dijo que estiman que la auditoría en sus oficinas podía llevarse a cabo hacia el final del año, para poder empezar a operar como banco en 2026. Con esta acción, que se produce en la antesala de la 88ª Convención Bancaria, y augura una mayor competencia en el sector. Aún está por verse si en México tendrá el mismo impacto que Nubank tuvo en la desconcentración del sistema financiero y la aceleración de los pagos inmediatos en Brasil.