La sostenibilidad es una apuesta a largo plazo que requiere acciones urgentes. A nivel global, se ha vuelto una prioridad que las empresas e industrias enteras se comprometan a eliminar sus emisiones de carbono y contribuyan a la lucha contra el cambio climático.
El sector TIC no es la excepción. Incluso, podría desempeñar un rol clave en la promoción de la sostenibilidad como parte del ADN de las empresas, debido a su impacto transversal en otras industrias.
Cada vez más, las empresas TIC incorporan la sostenibilidad como un eje clave de sus estrategias, por lo que en 2024 se espera que los planes verdes de las compañías se potencialicen de cara a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
Las compañías TIC en todo el mundo han comprendido que la sostenibilidad es una condición necesaria para avanzar en sus planes de digitalización, transformación digital e innovación.
Para saber más: Infografía | Predicciones DPL News 2024
En los últimos años, hemos visto a estas empresas comprometerse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Por ejemplo, América Móvil, Telefónica, Millicom, Huawei y Ericsson se han trazado ambiciosas metas de sostenibilidad de cara a 2030.
Las organizaciones TIC seguirán enfocándose en áreas como la eficiencia energética, el uso de fuentes de energía renovable, la gestión del agua, la reducción de emisiones de carbono, la gestión de residuos y la economía circular.
Algunas tecnológicas ya utilizan energía verde casi en su totalidad, como Meta y Google. Otras como Amazon y Microsoft esperan alcanzar ese objetivo en 2025. En el caso de las telcos, los operadores también avanzan en transferir su consumo eléctrico a fuentes renovables.
Por ejemplo, Claro Brasil, filial de América Móvil, tiene su propio parque solar para asegurarse por sí misma el suministro de energía limpia. Hoy, alrededor de 70 por ciento de sus operaciones funcionan con fuentes renovables de energía.
En 2022, el sector TIC estuvo muy atento a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP 27, incluso la empresa británica de telecomunicaciones Vodafone fue el socio principal de la cumbre.
Vodafone mostró en el evento cómo las tecnologías y servicios digitales pueden ayudar al ahorro de energía y ser aliados de sectores clave ―como la agricultura y el transporte, que tienen una gran huella de carbono―para optimizar sus operaciones y disminuir el uso de recursos y la emisión de gases contaminantes.
La participación de Vodafone envió un claro mensaje acerca del impacto transversal de la industria TIC en las agendas verdes y los planes de sostenibilidad.
También en 2023 se vio a varias grandes empresas emitir bonos verdes para respaldar sus planes de eficiencia energética. Telefónica y Ericsson fueron algunas de ellas.
BBVA preveía desde 2019 que las telcos en Europa serían las protagonistas de una nueva ola de “financiamiento verde” en los próximos años. Así que, probablemente, en 2024 observaremos a más compañías TIC subirse a la ola de bonos verdes con mayor intensidad.
Sin embargo, al mismo tiempo surgen nuevas cuestiones que atender para promover la sostenibilidad desde el ecosistema digital. Por ejemplo, la electromovilidad ha ganado terreno como una forma de descarbonizar el transporte, pero ahora el desafío es la correcta gestión de las baterías y cómo reciclarlas una vez que termina su vida útil en los vehículos.
También la aceleración de la conectividad y la digitalización exigen repensar en soluciones para la gestión de residuos electrónicos, su reuso, reciclaje y reutilización. Y en general, adoptar modelos de economía circular será uno de los grandes retos del sector TIC para 2024.
