El Senado de México aprobó por mayoría el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil a pesar de los argumentos de especialistas, industria, ciudadanos y senadores de la oposición sobre la violación de derechos humanos y riesgo a la privacidad.
Con 54 votos a favor, 49 en contra y 10 abstenciones, el Senado aprobó el dictamen en lo general, mientras que algunos legisladores determinaron reservas; sin embargo, ninguna de ellas se discutió ya que la mayoría decidió no hacerlo.
El dictamen plantea modificaciones a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión para que sea creado dicho padrón, y que será administrado por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
El padrón obligará a que las 120 millones de líneas móviles sean registradas con datos, como biométricos, y que al adquirir una línea el usuario presente una identificación oficial con fotografía.
En sesión del Pleno del Senado, los legisladores expusieron puntos de vista en contra y la mayoría a favor, aunque no se trató de una discusión, sino sólo de exposición de motivos, pues señalaron que en otras oportunidades ya hubo mesas de diálogo con los diferentes sectores interesados.
La Senadora del PAN, Xóchitl Gálvez, advirtió que los delincuentes no van a utilizar líneas registradas para hacer secuestros o extorsiones, en cambio, se incrementará el delito de robo de teléfonos para utilizar la SIM y delinquir.
Además, la legisladora colocó una leyenda en su pantalla –pues se encontraba en sesión a distancia– que decía “Nos vemos en la Corte”, y aseguró que irán con una acción de inconstitucionalidad.
Gálvez acusó que uno de los comisionados del IFT fue el que propuso incluir los datos biométricos en el padrón, ya que en el dictamen original no se incluían. “Quiere quedar bien porque quiere ser presidente del IFT”, comentó, sin dar un nombre específico.
Claudia Ruiz Massieu, senadora del PRI, comentó que propondrán reservas, al considerar que la propuesta del padrón es inviable y fomentará otros delitos sin que elimine el de secuestro o extorsión. Advirtió de las violaciones a los derechos humanos que traería la creación de dicha base de datos.
Ruiz Massieu propuso excluir la recopilación de datos biométricos, así como precisar qué autoridades podrán acceder al padrón sólo con previa orden de autoridad judicial de requerir la información, y modificar los términos de cancelación de prestación de servicio, así como la redacción para que sea optativa y no imperativa.
El Senador Miguel Ángel Mancera, del PRD, también propuso reservas para quitar los datos biométricos y eliminar el que cualquier autoridad pueda acceder a los datos de los ciudadanos sin autorización judicial. Sin embargo, tampoco se admitió a discusión.
El Senador del PAN, Damián Zepeda, también propuso una reserva para cambiar el tema de acceso a datos biométricos para que una orden judicial les permita el acceso y no se quedara como dice de origen el dictamen, que no contempla orden judicial, pero tampoco se admitió a discusión.
Lo mismo ocurrió con las reservas propuestas por los senadores panistas Antonio Martín del Campo y Alejandra Reynoso, de quienes no se aceptó la discusión de las reservas propuestas por cada uno al tema de biométricos.
Otros senadores como Gustavo Madero y Xóchitl Gálvez también presentaron reservas, pero tampoco fueron aprobadas para su discusión.
Lucía Trasviña, senadora de Morena, comentó que no está de acuerdo con que se violan los derechos de los usuarios, pues el padrón ya existe y las empresas de telefonía les otorgan esa lista con datos de los usuarios. Acusó que ese padrón se utiliza por parte de la oposición para cometer delitos electorales en tiempos de elecciones y por ello se dijo a favor.
“Ahora, yo quiero argumentar: ¿en manos de quién estuvo ese padrón anterior (RENAUT 2009)? En manos de ese cuerpo de seguridad que estuvo vinculado al crimen organizado. Hoy es distinto, hoy tenemos fuerzas de seguridad confiables. Por eso voto a favor”, expuso Trasviña.