El País Bernardo de Miguel
Google ha sufrido este martes una significativa derrota judicial, con potenciales repercusiones tanto para su modelo de negocio como para los ingresos de los Estados de la UE. El Tribunal de Justicia europeo ha avalado la legalidad del impuesto introducido por Hungría para gravar la publicidad comercializada por compañías radicadas fuera del país. Google se había negado a facilitar a las autoridades fiscales húngaras la información necesaria para calcular el gravamen. Budapest impuso una sanción multimillonaria al buscador. Los jueces comunitarios consideran que la multa es desproporcionada, pero han aceptado el derecho de las autoridades nacionales a exigir a la compañía los datos de su facturación y repercutirles el impuesto correspondiente.