El País Silvia Ayuso
La Unión Europea está dispuesta a seguir adelante por su cuenta con la aplicación de la tasa Google si no se alcanza un acuerdo global este año, según ha sentenciado este jueves el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni. “Lamento mucho la decisión de EE UU de interrumpir las negociaciones internacionales sobre la fiscalidad de la economía digital. Espero que esto sea un contratiempo temporal más que una interrupción definitiva”, ha afirmado tras conocerse el miércoles que EE UU rompería las negociaciones que se están llevando a cabo en la OCDE para crear un impuesto a nivel global.
La tasa Google es como se conoce popularmente al impuesto sobre determinados servicios digitales, que varios países europeos de la mano de la OCDE planean aprobar para que los gigantes tecnológicos tributen allí donde generan la actividad. En España se está tramitando en el Congreso un proyecto de Ley para gravar con un 3% los ingresos que las multinacionales tecnológicas obtengan por la explotación de datos de sus usuarios, por los servicios de publicidad online, y por los servicios de intermediación online.