Instagram recibe multa récord en Europa por no proteger datos de adolescentes
Instagram acaba de ser multada con 405 millones de euros (402 millones de dólares) por la Comisión de Protección de Datos (DPC, por sus siglas en inglés) de Irlanda. Se trata de la tercera y más grande multa que el regulador irlandes le ha impuesto a Meta.
La sanción llega después de una investigación que duró dos años en donde el organismo regulador se centró en determinar fallos en la aplicación de Instagram en lo que se refiere a la protección de datos de los usuarios de 13 a 17 años de edad.
La investigación comenzó en 2020, cuando el científico de datos David Stier descubrió que era muy fácil acceder a la información de los usuarios menores de 18 años, incluyendo direcciones de correo electrónico y números de teléfono, cuando estos activaban la opción de cuenta comercial. Los usuarios lo hacen con la intención de obtener métricas de los “me gusta” en sus publicaciones.
Stier compartió sus hallazgos con Instagram pero supuestamente no se tomó ninguna medida para arreglar la vulnerabilidad. Fue entonces cuando el experto presentó una queja con la DPC, advirtiendo que la red social pudo haber expuesto los datos personales de más de 5 millones de usuarios menores de edad.
La falta de acción de Instagram viola ampliamente el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la Unión Europea, que establece la autorización de los padres o tutores para el tratamiento de los datos de los menores de 16 años. Para hacer una cuenta en Instagram la edad mínima es de 13 años.
Meta expresó su desacuerdo con la multa en un comunicado y advirtió su intención de apelar la sanción. Agregó que la investigación se centra en configuraciones antiguas que ya se actualizaron hace un año. Ahora las cuentas de menores se configuran automáticamente como privadas y bloquean los mensajes adultos que no los siguen.
Esta es la tercera vez que el regulador irlandés multa a una empresa de Meta. Hace unos meses sancionó a WhatsApp con 225 millones de euros por falta de transparencia, y a Facebook con 17 millones de euros, también por falta de protección de datos de los usuarios.
El problema es que Instagram es la aplicación de Meta que más utilizan los usuarios jóvenes. Tras la denuncia de Frances Haugen, la compañía ha estado bajo escrutinio sobre el impacto de su producto social en la salud mental de los adolescentes y el manejo de su información. Aunque el jefe de Instagram, Adam Mosseri, ha propuesto como solución desarrollar una versión de la aplicación diseñada para menores de edad, los reguladores y padres de familia se oponen a ello, congelando los planes de la empresa.