Yandex ha probado su sistema de autoconducción en las situaciones más extremas para desplegar más de 100 vehículos en todo el mundo
La firma tecnológica rusa Yandex ha estado probando sus vehículos autónomos desde 2017 en carreteras públicas de tres países: Moscú, Innopolis y Skolkovo en Rusia; Las Vegas en Estados Unidos, y Tel Aviv en Israel.
Este despliegue tiene como objetivo probar su sistema de autoconducción en diferentes condiciones y entornos para construir una tecnología autónoma escalable. Yandex planea recopilar más datos con la introducción de más de 100 autos en todo el mundo a finales de año.
En un blog, Yandex señaló los desafíos que han enfrentado sus vehículos en estas ubicaciones, desde la diferencia entre semáforos hasta las condiciones climáticas.
Por ejemplo, en Rusia y Estados Unidos no hay tantas rotondas como en Tel Aviv, además es común que en esta ciudad los conductores estacionen sus autos en doble fila, lo cual requiere de gran precisión para los autónomos al responder en estas situaciones.
Su sistema también ha aprendido de los conductores de Moscú, quienes tienden a exceder los límites de velocidad, así como a lidiar con otros vehículos de dos ruedas como bicicletas, scooters y motocicletas que son más comunes en el centro de Tel Aviv que en Rusia.
El clima también representó un gran desafío, principalmente en Rusia, donde el vehículo tuvo que aprender a conducir durante nevadas que cubren las señales viales agregando ruido a los sensores.
Gracias a estas pruebas en nieve, Yandex enseñó a la red neuronal del automóvil a crear una imagen 3D de su entorno con el menor ruido posible, incluso en nevadas fuertes, para que puedan detectar objetos a su alrededor y permanecer en el carril correcto.
Mientras que en Israel, las temperaturas de hasta 40ºC hicieron que Yandex configurará su hardware y sensores para adaptarse a este clima, lo que generó que el auto pudiera funcionar con éxito durante todo el día.
¿Camiones autónomos podrán enfrentarse a carreteras con climas extremos?
Yandex se encuentra compitiendo con Daimler, quien el verano pasado desplegó sus automóviles en carreteras públicas de China. Así como con Waymo de Alphabet, que tiene una flota de más de 600 autos funcionando en Estados Unidos.