Sobrerregulación de la IA, ¿el mayor peligro para la competitividad en Estados Unidos? Demócratas y republicanos se enfrentan

El pasado 2 de abril se llevó a cabo en Estados Unidos la audiencia del Subcomité sobre Innovación y Competencia en Inteligencia Artificial (IA), en donde congresistas republicanos e instituciones solicitaron al gobierno no adoptar un enfoque regulatorio de la IA, debido a que esto podría afectar el desarrollo y la innovación del país en la materia, en contraste con las peticiones de representantes demócratas de aplicar una correcta regulación en beneficio de los consumidores.

Los participantes del Partido Republicano coincidieron en que Estados Unidos tiene una posición de liderazgo en el desarrollo de IA y crea herramientas que impulsan las economías locales y resuelven problemas reales en comunidades de todo el país, y señalaron que el mayor peligro para la competitividad del país en IA es la sobrerregulación gubernamental, especialmente en temas antimonopolio.

Jim Jordan, congresista republicano, afirmó que “Estados Unidos ha estado liderando la innovación siempre porque protegemos el libre mercado, pero con las regulaciones de IA del expresidente Joe Biden, la innovación se retrasó. Si China sigue invirtiendo billones de dólares en el desarrollo de la IA, entonces EE. UU. no liderará más el mundo de la IA. Lo que debemos proteger es el libre mercado, preservar la libre competencia y mantener al gobierno fuera del camino”.

Lee también: Trump is back. El destino manifiesto digital y la tecnología como armas del nuevo imperialismo

Neil Chilson, director de políticas de IA del Abundance Institute, mencionó que para mantener al país en una posición de liderazgo, “la política regulatoria de los fabricantes y empresas debe estar libre de barreras. De esta manera, se mantendrá la dinámica de la industria y se seguirán cosechando los enormes beneficios económicos de esta industria”.

En su turno, Joseph Coniglio, director de Antimonopolio e Innovación, Fundación de Tecnologías de la Información e Innovación, remarcó tres áreas en las que se debe trabajar para evitar una política antimonopolio en Estados Unidos: mantener una competencia saludable, actualizar el marco regulatorio (y no seguir el ejemplo de la Unión Europea) a favor del liderazgo en inversión y desarrollo, y cuestionar  cómo la misma política antimonopolio puede perjudicar a las empresas.

Jessica Melugin, directora del Centro de Tecnología e Innovación del Competitive Enterprise Institute, presentó su testimonio para enfatizar la importancia de que EE. UU. mantenga su liderazgo en IA. “Aunque existen desafíos, el consenso bipartidista reconoce el potencial de la IA para beneficios económicos, médicos y ambientales, y como una prioridad nacional frente a regímenes autoritarios como China”.

Recomendamos: Chips cerebrales, el dilema de la Inteligencia Artificial en el pensamiento humano

Melugin también usó el caso de la UE como un ejemplo de intervención regulatoria, lo que ha frenado su industria tecnológica: “Aunque la UE tiene un marco normativo de IA amplio, no tiene ninguna empresa tecnológica entre las 10 más grandes del mundo por capitalización de mercado”.

Previo a la audiencia, ACT | App Association, una asociación comercial global para pequeñas y medianas empresas tecnológicas, compartió su posición para no sobrerregular la IA en el país.

“Las pequeñas empresas están a la vanguardia de la innovación en IA y necesitan un entorno regulatorio que impulse el crecimiento, no uno que cree obstáculos innecesarios que las destruyan. Si los legisladores estadounidenses adoptan un enfoque europeo en IA, obtendremos resultados europeos: menor inversión, menos startups e innovación al ritmo del gobierno. Ese no es el futuro que nuestros miembros buscan construir. Lo único que estas empresas piden es una oportunidad justa para crecer y escalar sin verse ahogadas por la burocracia”, afirmó Morgan Reed, presidente de ACT | The App Association.

Demócratas advierten riesgos de una Inteligencia Artificial no regulada

Alvaro Bedoya, hasta hace unas semanas comisionado de la Comisión Federal de Comercio (FTC), participó en la audiencia para dar su testimonio. Subrayó la importancia de aplicar las leyes antimonopolio a las grandes empresas tecnológicas que desarrollan IA. Advirtió que la concentración del poder económico en unas pocas compañías puede sofocar la innovación, perjudicar a los consumidores y aumentar los riesgos sociales asociados al mal uso de la Inteligencia Artificial.

“La competencia es esencial para fomentar el desarrollo responsable de esta tecnología y la FTC está comprometida a actuar de manera firme y proactiva para prevenir prácticas anticompetitivas que puedan consolidar aún más el poder de estas grandes plataformas”. detalló Bedoya.

Jerry Nadler, miembro de la cámara de representantes por el Partido Demócrata, recordó la importancia de la Comisión Federal de Comercio.

Necesitamos de la FTC más que nunca para que incluso en la competencia por liderar la IA garanticemos la protección y la privacidad de los usuarios. Incluso antes de la era de ChatGPT, la FTC estaba preparada para  proteger a los consumidores. Necesitamos robustecer las acciones de la Comisión, porque además, uno de los asuntos más problemáticos es el acceso ilimitado que tienen algunas empresas de tecnología a los datos de los estadounidenses”, aseguró Nadler.

Lee también: FTC remueve publicaciones críticas sobre Big Tech luego de la salida de 2 comisionados demócratas

Al cierre, Jamie Raskin, miembro de mayor rango del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, acusó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de “desmantelar las salvaguardas clave de la Inteligencia Artificial y atacar a los reguladores independientes, dejando a los estadounidenses vulnerables a los crecientes peligros de la IA no regulada”.

“Es difícil pensar en un asunto antimonopolio más urgente que la concentración en el mercado de la IA. El dominio de un puñado de empresas de IA representa una amenaza a largo plazo para nuestra seguridad nacional, nuestra democracia, nuestra privacidad y la equidad básica en el mercado. Pero el presidente Trump ha sumido a nuestro gobierno en el caos y ha incapacitado a las agencias federales de las que dependemos para abordar estos problemas”, aseguró Raskin.

Para el legislador puede ser difícil responder eficazmente a lo que consideró “una peligrosa concentración del mercado en el conjunto corporativo de todo el conocimiento humano si tenemos un poder gubernamental peligrosamente concentrado en el presidente”.

Las normas federales más estrictas sobre IA fueron establecidas por el presidente Biden en una Orden Ejecutiva de 2023. El gobierno de Trump revocó dicha Orden Ejecutiva, que establecía límites para la industria de la IA.

“No satisfecho con esta revocación, el presidente ha obstaculizado y debilitado a la principal autoridad en materia de IA, la Comisión Federal de Comercio (FTC), que durante años ha estado a la vanguardia de la rendición de cuentas a las grandes tecnológicas, incluida la industria de la IA”, avisó el legislador.

AD 4nXdQTqFDw e54Lnf5jfaZD06Xe7ZwmS9GZFcYwSe0VtXVrQF8sXLYI4tm4CMpA5SsvI6Neq6ZPUEGdbsK4jCBX26wwBSeJYCUmk1sX50pQMcF6TlG uMg02K uNwekQuYK5srZtn?key=CHncdvN1tiAedYA TOjGwzhS

Por otro lado, citó informes que afirman que “Donald Trump ha otorgado acceso ilimitado a nuestros registros más privados y sensibles a Elon Musk. Datos que, sin duda, son invaluables para xAI, su empresa de IA. Hoy en día, ninguno de nosotros aquí sabe si Elon Musk está utilizando datos de estadounidenses, información clasificada y otra información sensible de bases de datos gubernamentales para entrenar los modelos de IA de su empresa y obtener una ventaja injusta sobre competidores y ciudadanos”.

Raskin aseguró que Musk se ha negado a responder a numerosas solicitudes sobre este tema, y que además ha paralizado a la agencia encargada de investigar posibles abusos tecnológicos.

Para el legislador, el presidente de Estados Unidos lidera desde una perspectiva a la que llamó “un nuevo régimen dominado por el poder monárquico, el favoritismo, la corrupción y la adulación. Trump está usando su cargo para enriquecerse a sí mismo, a sus amigos y a sus donantes, todo a costa del pueblo”.