Reforma tributaria en Brasil es aprobada; sector TI prevé aumento de 189% en impuestos
La propuesta de enmienda a la Constitución (PEC) reformula la tributación sobre el consumo, pero entidades prevén retroceso para el sector con aumento considerable de impuestos a software, TI e Internet y piden trato diferenciado.
Aprobada en la madrugada de este viernes 7 de julio por la Cámara de Diputados, la reforma tributaria PEC (propuesta de enmienda a la Constitución) obtuvo 382 votos a favor, 118 en contra, con tres abstenciones en la primera vuelta, y 375 votos a favor y 113 en contra en la segunda vuelta, consolidó la victoria de una batalla de 40 años. El informe final prevé un tratamiento diferente para diferentes productos y sectores, sin embargo, el sector de TI no se encuentra entre ellos.
El nuevo impuesto, en formato IVA (Impuesto al Valor Agregado), contempla dos tipos de aportes: federal (CBS) y estatal/municipal (IBS) que, en conjunto, suman una tasa estimada del 25 por ciento. Dentro de esa estimación, entidades de TI como Abranet, Fenainfo, Associação Asses pro, ACATE y SEINESP, en un manifiesto contrario a la decisión, prevén un aumento del 189 por ciento en la carga tributaria para el sector en el mejor escenario.
Esto porque toman en cuenta que miles de empresas del sector están ubicadas en municipios que tenían, en el antiguo impuesto, una tasa del ISS fijada en 2 por ciento.
Para asegurar que Brasil continúe en un escenario competitivo y lleno de crecimiento tecnológico, las mencionadas entidades reclaman, en el manifiesto difundido este jueves 6 de julio, que los impuestos referentes a la nómina generen créditos o queden exentos. Y, yendo más allá, que las empresas de software, servicios digitales e Internet queden libre de impuestos de manera definitiva.
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“La adopción de una tarifa estándar para IBS y CBS tiende a tornar inviables a innumerables empresas del sector”, dice el documento publicado por el sitio web Convergência Digital.
Compromiso con la competitividad y el crecimiento tecnológico
Rodolfo Fücher, presidente del directorio de la ABES (Asociación Brasileña de Empresas de Software), sostiene que la reforma tributaria aumenta varios desafíos para el sector, ya que el argumento de la simplificación oculta dificultades operativas que impactan la cadena de producción de software y ahuyentan inversiones y nuevos emprendimientos.
“Recientemente, un estudio del Instituto para el Desarrollo Gerencial (IMD) demostró la situación caótica en la que se encuentra Brasil en relación a su competitividad. Este resultado está directamente relacionado con la baja capacidad de Brasil para absorber tecnología. En 2020, el país representó el noveno mercado de TI más grande y, en 2022, caímos a la posición 12. Aumentar el costo de su acceso no ayudará a revertir esta situación, sino que comprometería aún más la competitividad y el proceso de neoindustrialización, que está entre las prioridades del actual gobierno”, reiteró Fücher.
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Volviendo al manifiesto, el documento defiende, como alternativa a tales problemas, una “adopción de una tarifa diferenciada para empresas de software, proveedores de servicios digitales y en Tecnologías de la Información e Internet (conectividad y servicios), en este momento, pudiendo materializarse en la inclusión del sector TI en la lista de servicios que formarán parte de la tasa reducida en un 50 por ciento (prevista en el §1, del art. 8, que trata de la reducción en un 50% de las tasas impositivas de que tratan los artículos 156-A y 195, V , ambos de la Constitución Federal)”.
¿Quién se beneficia con la reforma tributaria?
El informe final de la reforma fiscal aumentó de 50 a 60 por ciento la reducción de los tipos del IVA que se aplicará a algunos productos y sectores con trato diferenciado. Ellos son: transporte público, salud, educación, cultura y productos agrícolas fuera de la canasta básica nacional. Estos pagarán un 60 por ciento menos de IVA.
Otro sector que también se verá beneficiado es el sector industrial. “El texto presentado apunta a una reducción de la fiscalidad del sector industrial a costa de aumentar la fiscalidad de otros sectores y, en consecuencia, una fuerte pérdida de competitividad en sectores intensivos en mano de obra como los servicios digitales, TI e Internet”, reclamaron las entidades de TI.
Con información de Agência Brasil
