Perú | Están por remover al viceministro del MTC responsable del importante proceso de la Red Dorsal

Andina

El pasado 21 de enero fue designado como viceministro de Comunicaciones Virgilio Fredy Tito Chura. Como lo hicieron notar entonces diversos especialistas, una de sus principales tareas sería definir el proceso a seguir con la muy importante Red Nacional Dorsal de Fibra Óptica (RDNFO), que ese mismo mes de enero pasó a estar a cargo del Programa Nacional de Telecomunicaciones (Pronatel).

Un mes después de esa designación, Fabiola Caballero renunció al viceministerio de Transportes. Durante un período Caballero también estuvo encargada de Comunicaciones. Y entre los serios señalamientos que hizo fue el de la presunta intención del exministro Juan Silva, ahora prófugo, y otros funcionarios de direccionar ese importante proceso a favor del consorcio que integran las empresas Gilat y Optical.

La Red Dorsal debería darle al Estado acceso a Internet de buena calidad, pero esto no ha ocurrido a pesar de que se invirtió US$170.8 millones en su construcción y US$132.7 millones de mantenimiento durante los cinco años que duró la concesión de la filial peruana de la mexicana Azteca. Además de esos grandes montos, durante ese período el Estado ha pagado US$450 millones por servicio de Internet. De acuerdo con un informe del propio MTC, el uso de la Red Dorsal solo llega al 3.2% de su capacidad.

CARETAS viene advirtiendo de esta preocupante situación desde enero último.

Y ahora se prepara el terreno para sacar del camino a Tito Chura, quien, según fuentes enteradas del proceso, ha insistido en que la Red Dorsal no sea objeto de irregularidades. 

El viceministro Tito Chura es ingeniero electrónico, especialista en redes de computación y en inteligencia artificial. Está certificado en EthicalHacking por el Consejo Internacional de Consultores de Comercio Electrónico de Estados Unidos. Su experiencia está sobre todo en la seguridad informática y la ciberseguridad. Si bien no estaba vinculado al mundo de las telecomunicaciones, su paso como auditor externo de la Contraloría General hace seis años denota conocimiento para detectar licitaciones cuestionables.   

El 16 de junio llegó a la mesa de partes de la Presidencia del Consejo de Ministros un proyecto de resolución suprema que designa como nuevo viceministro de Comunicaciones a Hugo Ávila Vargas. Se anexa un oficio firmado por Alan Rodolfo Núñez Aldana, secretario general del MTC, que le remite a Rodolfo Gustavo Ramírez Apolinario, secretario del Consejo de Ministros, los proyectos de la resolución de cese y la del nuevo nombramiento. 

En la evaluación de la PCM se concluye que Ávila, ingeniero mecánico electricista, cumple con los requisitos establecidos para ser viceministro. Y se apunta, por cierto, que el candidato cuenta con 77 años. También se anexan sus certificados de estudios y laborales, además de las declaraciones juradas.

Por alguna razón el relevo no se había concretado pero en las últimas horas volvió a trascender que se llevará a cabo en los próximos días. 

¿Por qué cambiar una vez más al viceministro de Comunicaciones? Sería el quinto en lo que va de este trajinado gobierno. El actual titular del MTC, Juan Barranzuela, prometió luchar “contra la corrupción y la burocracia obstruccionista”. 

UN PROCESO CUESTIONADO

La exviceministra Caballero, que puso en evidencia el presunto tinglado de corrupción en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), declaró explícitamente en febrero:

“Detuve un proceso en Pronatel que pretendía sin mucha transparencia otorgar el mantenimiento de la red dorsal de fibra óptica favoreciendo a una empresa. Es así, que no se adjudicó dicho contrato. Recomendé al director ejecutivo de Pronatel que la propia institución asumiera la ejecución de su mantenimiento de manera temporal y que revisara el modelo de la red dorsal tal como se había llevado en los últimos años. Mi capacidad técnica me indicó que no debíamos sacar adelante dicho proceso, ni dicho contrato, y actuar con absoluta transparencia en los procesos de contrataciones. El resultado fue la destitución, sin mi conocimiento, del director ejecutivo de Pronatel que había defendido la transparencia del proceso”.

En los chats que posteriormente se dieron a conocer entre Caballero y Silva, el segundo calificó de “ruido” las advertencias sobre la materia como las que publicó CARETAS, y demandó que se siguiera adelante con el proceso. Pero Caballero no se amilanó y encargó un modelo de tres escenarios para encontrar cuál era el menos deficitario para el Estado. De allí la conclusión que Caballero mencionó, que la figura menos onerosa era que Pronatel asumiera la ejecución del mantenimiento de manera temporal para así revisar el modelo que hasta ahora ha fracasado.

A pesar de ello, en marzo se convocó un nuevo proceso. Y en mayo ingresó a Contraloría una denuncia según la cual Pronatel está “direccionando el concurso para la RDFNO (Red Dorsal de Fibra Óptica Nacional) a la contratista Gilat o posible consorcio Gilat Optical”. Señala el denunciante, que proviene de la propia institución, que “los numerales en especial referente a Experiencia del Contratista (14.2) fue modificado del pliego anterior en el cual no existía dicho punto”. 

El pliego anterior establecía en su punto 14 que “el Contratista debe contar con experiencia acreditada por un monto facturado acumulado a una (01) vez el valor estimado de la contratación, en contrataciones de servicios iguales o similares al objeto de la convocatoria, durante los diez (10) años a la fecha de presentación de ofertas. Se consideran servicios similares los siguientes:1) Operación y/o mantenimiento de redes de telecomunicaciones. 2) Diseño, instalación e implementación de redes de transporte en telecomunicaciones aplicando/utilizando MPLS (Multiprotocol Label Switching) y/o GMPLS (Generalized Multi-Protocol Label Switching) y/o ASON (Automatically Switched Optical Network) y/u OTN (Optical Transport Networking). 3) Brindar servicios públicos de telecomunicaciones a nivel nacional.4) Contar con al menos cinco años gestionando Centros de Operaciones de Red -NOC con su respectivo Data Center.

Pero el pliego nuevo materia añadió en el numeral 14.2 que “dicha experiencia, en servicios iguales o similares, deberá ser acreditada con servicios realizados como mínimo en nueve regiones, de las cuales tres regiones deben ser de la zona norte, tres regiones de la zona centro y tres regiones de la zona sur. Estas regiones de la zona norte, centro y sur se encuentran referidas a las regiones inmersas en los proyectos Cobertura Universal Norte, Cobertura Universal Centro y Cobertura Universal Sur, proyectos que conforman la RDFNO”. 

Exactamente los requisitos con los que cumple Gilat. “Una empresa con experiencia en operación y mantenimiento no debe verse limitada a que dicha experiencia sea específica en zonas determinadas ya que los procesos técnicos dependen de una ejecución bajo parámetros técnicos y no dependen del desarrollo en una determinada zona geográfica”, advierte el documento. “Adicionalmente el proceso quedaría cerrado solo a empresas locales y elimina la posibilidad de participación de empresas del extranjero con vasta experiencia en posible asociación con empresas peruanas”. 

Por cierto, Gilat ha tenido problemas en esos proyectos que operan en regiones.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies