Reforma Jorge F. Negrete P.
X (antes Twitter) sale de Brasil por la presión del Poder Judicial de ese país, específicamente por Alexandre de Moraes, presidente del Tribunal Superior Electoral y juez del Supremo Tribunal Federal.
El debate hoy es que las plataformas digitales, su función social y sus responsabilidades pasan por la interpretación sobre conceptos como libertad de expresión, libertad de prensa y derecho a la información. Estos conceptos son polisémicos en Occidente, América Latina, Europa, Estados Unidos e incluso China. El concepto de “Occidente” no existe a la hora de interpretar estos conceptos o acceder a una lógica comprensible. Todos piensan diferente.
EUA. Una disposición que ha garantizado el desarrollo de la innovación y el funcionamiento de las plataformas en Internet es la muy conocida “Sección 230” de la Ley de Telecomunicaciones de 1996. Esta disposición establece que “ningún proveedor o usuario de un servicio informático será considerado como el editor o portavoz de cualquier información proporcionada por otro proveedor de información”.
Además, la Sección 230 brinda la protección “contra la responsabilidad para los operadores de servicios informáticos interactivos que eliminen o moderen de buena fe material de terceros que consideren obsceno, lujurioso, lascivo, sucio, excesivamente violento”. Esta regulación garantizó el desarrollo de las plataformas de manera masiva, al eximirles de responsabilidad objetiva por los dichos o posteos de sus usuarios.
En contrasentido, el Congreso de Texas aprobó un estatuto que regirá las plataformas digitales (Moody vs. NetChoice), en particular, la moderación de contenido de las empresas con más de 50 millones de usuarios. Entre otras disposiciones, la ley prohíbe a las plataformas “censurar, eliminar u ocultar contenido”.
Es decir, el debate en Estados Unidos radica en la tensión natural entre la libertad de expresión y la moderación de contenidos que puedan generar desinformación, apología del delito o calumnia. Algunos estados no quieren que se elimine nada de las redes.
Brasil. El juez Alexandre de Moraes, feroz con de las redes sociales, inició una investigación sobre la difusión de noticias falsas y ordenó la retirada de cientos de publicaciones privadas en X que cuestionaban la fortaleza del sistema electoral. “No podemos caer en este discurso fácil de que regular las redes sociales va en contra de la libertad de expresión. Lo que no se puede hacer en el mundo real, no se puede hacer en el mundo virtual.” Y agregó que las redes sociales son “tierra sin ley”.
Frente al juez, Elon Musk, presidente y dueño de X, señaló que “para proteger la seguridad de nuestro personal, hemos tomado la decisión de cerrar nuestra operación en Brasil, con efecto inmediato”. “Alexandre de Moraes amenazó a nuestro representante legal en Brasil con arrestarlo si no acatamos sus órdenes de censura”.
Europa, Estados Unidos, China y ahora América Latina interpretan la libertad de expresión con diferentes enfoques. EUA quiere sancionar la censura de hechos y dichos que en Europa y América Latina se considerarían como Fake News; Brasil quiere bajar diversos conceptos considerados como noticias falsas o Fake News, en sentido contrario a EUA.
Yann LeCun, jefe de Inteligencia Artificial en Meta, señaló que “EUA y la Unión Europea tienen ideas diferentes sobre qué expresiones son aceptables y cuáles no”. Ambos restringen la difamación, el fraude, la pornografía infantil, el discurso que viola la ley de propiedad intelectual. EUA restringe la obscenidad, algo que la UE no hace (UE es mucho más libre que EUA en esa dimensión). EUA desaprueba las expresiones que menosprecian la religión. Gran parte de la UE no lo hace (véase la saga de Charlie Hebdo).
El debate para regular las plataformas digitales o redes sociales pasa por las distintas interpretaciones de las libertades en materia de información.
Hablamos y comprendemos cosas distintas en materia de derecho a la información y libertad de expresión en Occidente.
Presidente de Digital Policy & Law
X: @fernegretep