Ericsson arrancó el periodo de tres años por el que un monitor de cumplimiento independiente supervisará las tareas de la compañía. La medida es parte del Acuerdo de Enjuiciamiento Diferido (DPA, por sus siglas en inglés) de tres años con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
El monitor seleccionado fue Andreas Pohlmann, de la firma Pohlmann & Company, de acuerdo con un comunicado del proveedor de infraestructura.
La principal responsabilidad del monitor será revisar el cumplimiento de Ericsson con los términos del acuerdo DPA y evaluar el progreso de la firma en la implementación y operación de su programa de cumplimiento mejorando los controles que lo acompañan.
Ericsson ha estado cooperando voluntariamente desde 2013 con las investigaciones de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) y con el Departamento de Justicia del mismo país (DoJ), en relación al cumplimiento de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA). Según estas investigaciones, la compañía sueca violó el Código de Ética Comercial de la Compañía y la FCPA en seis países: China, Djibouti, Indonesia, Kuwait, Arabia Saudita y Vietnam.
Las sanciones monetarias por los casos de corrupción alcanzan los mil millones de dólares, según los cálculos de la compañía.