Dish: fusión con DirecTV es “inevitable”

Tras dar a conocer los resultados anuales, el Presidente de Dish Network, Charlie Ergen, dijo que una fusión con DirecTV, que se rumoreaba desde hacía mucho tiempo, era “inevitable”, a pesar de la reticencia de AT&T a deshacerse del activo.

La excusa del ejecutivo para una posible fusión es que ninguno de los dos servicios de TV satelital estaba creciendo. Dish, que sigue analizando sus posibilidades para convertirse en el cuarto operador móvil de Estados Unidos, entiende que actualmente la regulación no debería impedir la fusión.

El operador satelital bajó su utilidad neta un 11 por ciento en 2019 y redujo un 3 por ciento la cantidad de suscriptores de TV paga. “Perdimos aproximadamente 336 mil suscriptores netos de TV de paga durante el año que terminó el 31 de diciembre”, en comparación con una pérdida de aproximadamente 920 mil en 2018, dijo Dish en un documento regulatorio.

“El crecimiento de la televisión no proviene de los proveedores de televisión lineal, sino de los grandes programadores”, explicó Ergen a los analistas, en referencia a la competencia de la era de la transmisión. Reconoció que los problemas regulatorios se interponían en el camino de una posible fusión de DirecTV-Dish, pero agregó que la lógica de la industria hizo probable una transacción en algún momento.

Para el ejecutivo, ambas compañías “deberían unirse” para revertir la tendencia de la pérdida de clientes. Aunque no está claro cómo sería una fusión.

Con expectativas en la unidad móvil

En conferencia con analistas, Ergen mencionó que la compañía probablemente recurriría a socios estratégicos para ayudar a compensar el elevado costo del lanzamiento de una posible unidad móvil. Algunos medios especularon con la posibilidad de que Dish recurrirá a Silicon Valley para un inversor estratégico a medida que construye una red celular, con Amazon u otra plataforma tecnológica vistas como posibles inversores a largo plazo.

Cuando se conoció la posibilidad de que Dish se quede con el área prepago de Sprint, tras la fusión con T-Mobile, se había barajado que Google sea el socio estratégico que necesitaba para operar el negocio móvil.