Santiago de Chile. Una hoja de ruta clara y con la digitalización en el centro será escenario propicio para el desarrollo de América Latina, coincidieron los participantes de la apertura institucional de Chile Digital, evento organizado por DPL Live. Las cifras acompañan al país para presentarse como hub digital de la región, pero aparecen nuevos desafíos que deben abordarse considerando aspectos tecnológicos, sin perder de vista que, a fin de cuentas, se trata de un reto social.
“América Latina no debe limitarse a ser consumidor de tecnología”, inició Marco Llinás, director de la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). El ejecutivo pidió “enfocar los esfuerzos en digitalización, con agendas que fortalezcan a la región”, contemplando que América Latina sigue atrapada en tres trampas que impiden su desarrollo (baja capacidad de crecimiento, desigualdad y limitada movilidad social, y debilidad institucional).

Sobre Chile, Llinás enfatizó que el país es referente en muchos índices y resaltó que el liderazgo no sólo se construye con infraestructura, también con coordinación público-privada y marcos regulatorios favorables para la innovación.
El subsecretario de Telecomunicaciones, Claudio Araya San Martín, valoró índices que ubican a Chile en lo más alto de la región, como redes que cubren más del 90 por ciento del territorio poblacional, alta capilaridad de fibra óptica y un fuerte crecimiento de 5G hasta más de 6 millones de accesos. “Tenemos muchos puntos saldados, nos falta un salto de productividad”, consideró al mencionar que, por ejemplo, el incremento de líneas de quinta generación “no significa que se esté haciendo un uso distinto al 4G”.
Rodrigo Ramírez Pino, presidente de la Cámara Chilena de Infraestructura Digital (Idicam), también destacó algunas cifras locales, como un incremento de 54 por ciento interanual en 5G, mayoría de accesos a banda ancha fija vía fibra óptica y Chile como el país de la OCDE que más fibra construyó en los últimos años. “Somos un sector con una inversión per capita muy grande a pesar de que la industria está contra la pared”, enfatizó. Luego pidió avanzar en discusiones sobre ciertos temas, como un marco regulatorio moderno que promueva la inversión y asegure la sostenibilidad financiera a partir de una competencia sana, silencio positivo y una nueva estructura tarifaria.

“Hay que ser conscientes de la importancia de la digitalización”, puntualizó el diputado Diego Ignacio Schalper Sepúlveda, quien puntualizó que el desafío resulta complejo porque se trata de una industria con políticas que, en general, no reportan un retorno electoral de corto plazo. Schalper Sepúlveda indicó que se propondrá a presidenciables desde el Congreso una hoja de ruta en materia digital y relativizó la importancia de regular en etapas tempranas los desarrollos tecnológicos. “¿Por qué tenemos que ser los primeros en legislar? No siempre tiene sentido, es necesario un diálogo abierto y profundo porque cometer errores puede resultar muy caro”.
En nombre de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) habló Sergio Scarabino, quien pidió no quedarse sólo en “conectividad vacía” sino avanzar en conectividad significativa. También propuso aprovechar las virtudes de la tecnología.
El cierre estuvo a cargo de la ministra de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de Chile, Aisén Etcheverry, quien aseguró que “el ecosistema digital es maduro y crece, tiene ambición de ser determinante para el desarrollo local y eso, más que una discusión tecnológica, es una conversación social”. Como conclusión, sugirió que el actual es un momento distinto a otros en materia de transformación digital, porque “la visión estratégica de Chile ha permitido que pasemos de esperar a ser protagonistas”.