La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) aprobó el reparto del coste neto del servicio universal de telecomunicaciones en España en 2019. El valor fue de 6.8 millones de euros, 53 por ciento menos que el año previo. Telefónica, el responsable de ejecutarlo, costeará 43 por ciento del total, mientras que otros operadores con ingresos superiores a 100 millones de euros pagarán el resto.
Las firmas alcanzadas por la descripción deberán ingresar las cantidades señaladas en el plazo de un mes desde la notificación. Telefónica es el operador con derecho a compensación. Además de su 43 por ciento, la división por grupo económico se completa de la siguiente forma: Orange (23%), Vodafone (19%), MásMóvil (9%) y Euskaltel (3%). El resto se dividirá entre otros prestadores.
El regulador español buscó quién se ocupe de la ejecución del servicio universal desde 2023 pero, al no presentarse interesados en la licitación, optó por mantener como responsable a Telefónica por este año y el próximo. El operador seguirá cumpliendo la tarea pero bajo las nuevas reglas que aplican por la entrada en vigor de cambios en la Ley General de Telecomunicaciones.