En medio de un contexto de escasez de componentes para redes y el rechazo de naciones occidentales a fabricantes chinos, el Reino Unido anunció nuevas acciones como el apagado de las redes 2G y 3G para incrementar la seguridad de las redes, impulsar el desarrollo de componentes en el país y contribuir al aseguramiento de las cadenas de suministro a nivel mundial.
El Departamento para lo Digital, Cultura, Medios y Deporte (DCMS, por sus siglas en inglés) anunció que las redes 2G y 3G están programadas para ser apagadas hacia el año 2033, con lo que espera acelerar el despliegue de redes 5G, liberar el espectro en uso para estas redes y reducir los costos de operación de los proveedores de servicios, además de preparar el mercado para el desarrollo de 6G.
“Establecer un cronograma para la liquidación de estos servicios sigue las recomendaciones del Grupo de trabajo de diversificación y permitirá que nuevos proveedores ingresen al mercado al brindarles certeza sobre cuándo pueden comenzar a trabajar en la construcción de redes 5G en Gran Bretaña”, señaló el Departamento.
Como es de esperar, algunos operadores se adelantarán a la fecha límite establecida por la autoridad británica. En Estados Unidos, compañías como AT&T y Verizon ya realizaron el apagado de sus redes 2G, mientras que T-Mobile lo haría hacia finales de 2022.
El programa del gobierno británico es parte de un plan más amplio que incluye la inyección de hasta 50 millones de libras al mercado para impulsar la investigación y desarrollo en el sector de telecomunicaciones.
Recientemente, el gobierno introdujo la Ley de Seguridad de Telecomunicaciones, que incluye un fondo de hasta 250 millones de libras, “para construir una cadena de suministro más competitiva, innovadora y diversa”, y reducir la dependencia del mercado a unos cuantos fabricantes.
Luego de que Estados Unidos impusiera restricciones comerciales sobre fabricantes chinos como Huawei y ZTE, múltiples operadores y autoridades en el mundo cuestionaron dichas medidas al considerar que no existen las suficientes alternativas que tuvieran la escala y, en especial, los precios ofrecidos por dichos fabricantes.
Aunque Ericsson y Nokia lograron ganar terreno y atender parte del mercado restringido a Huawei, gobiernos europeos y de Estados Unidos han impulsado programas para la construcción de alternativas que permitan ampliar el número de proveedores y reducir la dependencia del sector a un número reducido de fabricantes, para lo cual Open RAN ha surgido como una de las principales opciones.
En ese sentido, el Reino Unido reveló su compromiso de mover al menos el 35 por ciento del tráfico de la red móvil a Open RAN para 2030, a través de 36 millones de libras en financiación para 15 proyectos en Escocia, Gales e Inglaterra, y una inyección en efectivo de 15 millones de libras para la instalación de prueba del prototipo SONIC para tecnología de telecomunicaciones de próxima generación.
Nadine Dorries, secretaria Digital del Reino Unido, planea una reunión con la Secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Riamondo, en la que discutirán proyectos de investigación y desarrollo para el sector de telecomunicaciones.
“Los líderes renovarán su compromiso de diversificar la cadena de suministro de telecomunicaciones global y debatirán las ambiciones compartidas y la cooperación en la política de datos transatlánticos. La secretaria Digital se reunirá con varios ministros y funcionarios de alto nivel en la visita de cuatro días a Washington DC y Nueva York para fomentar la cooperación en sus prioridades digitales y tecnológicas”, señaló en un comunicado.