Panamá | Decisión de DDHH de la ONU por caso de Martinelli ‘debe cumplirse’, dice jurista en derechos humanos

La Estrella de Panamá Mirta Rodríguez P.

Mientras que el expresidente panameño Ricardo Martinelli deberá enfrentar este miércoles, 21 de julio, un nuevo juicio por su supuestas  escuchas telefónicas o los llamados “pinchazos”, el jurista y experto en derechos humanos internacional, Víctor Rodríguez Rescia, advirtió que Panamá debe cumplir con la declaración que emitió la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas por la detención arbitraria del exgobernante panameño, de lo contrario estaría “ignorando” su compromiso con los estándares internacionales.

“Aquí no se trata de defender o no a Martinelli, se trata de defender la institucionalidad, porque esas debilidades institucionales en la falta de utilización y vinculatoriedad de las decisiones de Naciones Unidas, que son Órganos creados por tratados son vinculantes, son obligatorios, no están pintados en la pared”, afirmó  Rodríguez Rescia, en declaraciones a KW Continente y Nex TV.

El también presidente del Centro de Derechos Civiles y Políticos con sede en Ginebra, Suiza, destacó que este caso se presentó por violación al derecho de la libertad del expresidente Martinelli y el Grupo de Trabajo de Detención Arbitraria de la ONU hizo el análisis pertinente de todo el proceso, tanto de la prueba (no solo de la manera en que fue detenido), cómo se instruyó, cómo se investigó y las debilidades.

Posteriormente, Naciones Unidas “prácticamente emitió una resolución que debe ser cumplida, pero que no ha sido cumplida por Panamá. Después en el proceso se le absuelve al presidente Martinelli, pero luego se genera una nulidad y ahora se está repitiendo el proceso. Yo siempre digo que en guerra avisada no muere soldado”, sentenció Rodríguez Rescia.

Manifestó que “si ya las Naciones Unidas observó el proceso y dio una mirada desde afuera de los estándares internacionales, es decir, de los tratados que Panamá se ha comprometido a cumplir, y ya hizo un análisis de este caso, entonces, ya debería observarse esos estándares y no ignorarlos… porque finalmente a quien se responsabiliza es a Panamá, y no al poder judicial, y quien va a pagar las consecuencias en términos de reparaciones es el pueblo,… que se pueden cobrar”.

Sin embargo, el jurista consideró que este es un tema de “actitud” por parte del Estado, de que, “si se compromete a asumir la responsabilidad, de cumplir los tratados internacionales, lo tiene que hacer de buena fe, con humildad, inclusive, siguiendo los estándares internacionales, y no ignorándolos”.

El documento aprobado el 15 de agosto de 2019 y publicado el pasado 2 de octubre, concluye que la detención provisional de Martinelli en Panamá violó  la Declaración de los Derechos Humanos y el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos.

En la misma  ordena que Panamá como signatario, indemnice al exmandatario y realice una investigación “exhaustiva” e “independiente” en relación con las decisiones que fueron tomadas para mantenerlo en detención provisional desde el 11 de junio de 2018 hasta el 12 de junio de 2019.

Sin embargo, añadió Rodríguez Rescia: “mucho ojo, porque en el caso de Martinelli, lo mismo que en el caso de Ricardo Traad (exdirector del desaparecido Servicio Marítimo Nacional), (a quien también se le demostró la detención ilegal arbitraria), si sigue vinculado en un proceso hay consecuencias, y sería un incumplimiento o mora de carácter internacional, que deja mal parado a Panamá”.

Mencionó que el caso del expresidente Martinelli, no solo está ante el Grupo de Trabajo de Detención Arbitraria de las Naciones Unidas sino también se está tramitando ante el Comité de Derechos Humanos del organismo. Y en ese contexto dijo que le ha llamado mucho la atención de “que en Panamá hay un problema de cultura jurídica, y se cree que el litigio empieza y muere en el Sistema Interamericano, y eso es un grave error. No solo la Comisión y la Corte Interamericana existen”. https://809d78ba5a3b8fbf8b79135c9936b6a8.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-38/html/container.html

Recapituló que antes de la Comisión, del Sistema Interamericano y de la Convención Americana, en Naciones Unidas ya existía un tratado anterior, y que más bien la Convención copió los estándares del pacto de derechos civiles y políticos de 1966, que son los estándares que utilizó el grupo de trabajo para determinar las violaciones por detención arbitraria en el caso de Martinelli y de Tradd; mismo que también utiliza el Comité de Derechos humanos

Entonces, “los jueces lo que deben hacer en lugar de taparse la vista es aplicar los tratados internacionales, no solo a convención sino en pacto como derecho interno en Panamá aquí y ahora. Si los jueces y juezas creen que los tratados de derechos internacionales son solamente para litigar afuera, están totalmente equivocados, porque hay un control de convencionalidad que se aplica en todas las circunstancias en el marco de constitucionalidad de Panamá”.

A su juicio, ahora “la tarea que hay es  reeducar o reconstruir la mentalidad de que los tratados no son vinculantes para Panamá. Esa es una tarea apoteósica que hay y que empiezan en las facultades de Derecho. Me pregunto ¿dónde están los Colegio de Abogados en esos temas, porque son ellos los usuarios del sistema de justicia?”.

Rodríguez Rescia también se refirió a la medida de protección dictada por las Naciones Unidas por el tema salud del expresidente Martinelli, expresando que se trata de una especie de medida cautelar emitida por el Comité de Derechos Humanos no por el grupo de trabajo.

Explicó que debe informarse ante esta instancia (Comité de Derechos Humanos) si a Martinelli se le está respetando los riesgos de salud que puede tener en el marco de su detención y de todo el caso que lo involucra. Es decir, “no se limita solo a la situación carcelaria en que la estuvo, especialmente, porque ha pasado por transes médicos que están documentados y que son importantes”, dijo.

Afirmó que “el acceso a la justicia tiene que ver también con la calidad de la justicia y también en el trato que se le da a la persona en términos de salud para enfrentar una justicia con el debido proceso y con derecho a la defensa apropiadamente”.

Resaltó que el Comité de Derechos Humanos es como la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a nivel global, y es el que vela por la protección del pacto del principal tratado de Naciones Unidas en general.

Sin embargo, “hay muy pocos casos que se llevan ante el Comité de Derechos Humanos, porque hay una nueva formación jurídica que cree que el mundo empieza y muere con el Sistema Interamericano”, por lo que “hay que activar los mecanismos de Naciones Unidas, porque son potentes, porque son importantes, porque tienen mandato para hacerlo y porque Panamá se comprometió de buena fe, ratificó esos tratados y aceptó las jurisdicciones en la competencia del Comité de Derechos Humanos”.

Por lo tanto, “no se puede después de haber aceptado internacionalmente la competencia contenciosa del Comité de Derechos Humanos, desistir de ella. Eso viola el principio de buena fe,… y Panamá entraría en una situación de mora internacional”.

El caso

Este miércoles, 21 de julio, Martinelli enfrentará un nuevo juicio, tras la anulación del primero, por un caso de espionaje político durante su periodo de mandato entre 2009-2014.

La audiencia comenzará un mes después de la fecha prevista debido a dos suspensiones. Pero ahora solo enfrentará dos delitos: interceptación de telecomunicaciones; y seguimiento, persecución y vigilancia sin autorización judicial, que lo expondrían a una pena de hasta ocho años.

Martinelli dijo través de las redes sociales que esta vez sí asistirá al juicio, después de haberse ausentado en dos fechas anteriores, alegando un reposo médico por una cirugía de la columna. El Tribunal advirtió que no aceptaría más dilaciones.

El caso conocido como pinchazos comenzó en junio del 2015 en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) cuando Martinelli era diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen), pero tras ser extraditado el 11 de junio de 2018 por Estados Unidos, donde estuvo preso un año, renunció a la diputación y pasó a la justicia ordinaria panameña.

En agosto de 2019 fue declarado “no culpable” en un primer juicio, en el que enfrentó cuatro cargos que sumaban 21 años de cárcel y que fue anulado por un tribunal de Apelaciones.

Martinelli, de 69 años de edad, creó el nuevo partido Realizando Metas, con el que pretende presentarse a las elecciones de 2024.