En los últimos 10 años, México se ha posicionado como un hub de centros de datos en América Latina por diversos factores, como su ubicación geográfica y su relación comercial con Estados Unidos y Europa.
El despliegue de infraestructura de datos en el país ha sido detonado por las aplicaciones que la utilizan, como Zoom y Facebook, las cuales crecieron a un ritmo tres o cuatro veces mayor al que tenían antes de la pandemia, ya que ayuda a reducir la latencia, es decir, la velocidad de respuesta, y tener un carril más ancho de banda para brindar soluciones digitales a todos los usuarios del continente.
Así lo expresó Emigdio Granillo, director General de Stulz México, una empresa proveedora de servicios de enfriamiento para centros de datos, en entrevista con DPL News.
El ejecutivo, que cuenta con 13 años de experiencia en la industria de centros de datos, explicó que, en el transcurso de una década, grandes empresas han llegado a México a invertir en infraestructura de datos de hiperescala en el territorio nacional, las cuales ahora contratan talento local para tomar la estrategia y la dirección de sus operaciones, y Querétaro se ha convertido en el centro más importante del país.
Sin embargo, Granillo advierte que Querétaro pronto se saturará por el consumo de energía y agua que implica la instalación de esta infraestructura crítica, lo que le abrirá la oportunidad a ciudades como Puebla, Toluca y Aguascalientes para desplegar centros de datos.
De ahí que Stulz busque expandir geográficamente sus operaciones, ya que actualmente 60 por ciento de sus soluciones se concentran en el centro del país; 20 por ciento en el Bajío y el 20 restante en el noreste, principalmente en Monterrey, con una estrategia de gerentes territoriales.
Granillo explica que, en el ecosistema de los centros de datos, todos los actores son medulares. La provisión de energía se ubica en primer lugar, y el enfriamiento en segundo, ya que representa alrededor del 40 por ciento de la inversión; mismo porcentaje de consumo eléctrico que ocupan sus sistemas de aire acondicionado de precisión.
Por ello, ahora la compañía se enfoca en el ahorro de energía, en reducir el consumo eléctrico a partir de tres ejes; huella, consumo de energía y adaptación a las necesidades de cada proyecto. Granillo explica que el enfriamiento líquido permitirá reducir alrededor del 80 por ciento de las máquinas dentro de una sala de cómputo y aumentar hasta 10 veces la capacidad de enfriamiento.
Stulz, una empresa de origen alemán, comenzó sus operaciones en México en marzo de 2014. En un año casi duplicó su participación de mercado, al pasar de tener el 15 por ciento en 2018 al 28 por ciento en 2019. En 2020 se mantuvo estable y para 2023 aspira a ser el principal proveedor de soluciones de enfriamiento para operaciones de misión crítica en el país.
Su principal sector es el de las telecomunicaciones, que equivale a casi la mitad (45%) de sus operaciones, con clientes como Telcel, AT&T y Telefónica. En el sector automotriz colabora con las armadoras alemanas BMW, Volkswagen y Audi, y además busca expandirse a los sectores de la logística y el retail, la Industria 4.0, las oficinas y 5G, para el que Granillo proyecta que en 2025 México ya tendrá un despliegue avanzado.
El CEO de Stulz proyecta que la realización de la licitación 5G del IFT disparará pruebas y pilotos por parte de los operadores móviles, en las que las ciudades principales serán Guadalajara, México y Monterrey, lo cual seguirá atrayendo inversiones para el país.
Respecto a la reciente caída de todos los servicios de Facebook, Granillo explica que hubo una falla de centros de datos detrás de la interrupción, lo que ha sido reconocido por la propia empresa. “La nube es un concepto; físicamente está aterrizada en un centro de datos”, sentencia.
Por ello, resaltó la importancia de hacer inversiones inteligentes. “Hay que revisarlas, pero no hay que detener las inversiones en tecnología que ayudan a robustecer las operaciones en los próximos años”, concluyó.