Inteligencia Artificial, la peligrosa brecha de conocimiento

Esta semana Google presentó, en el evento “Google for Mexico”, una nueva herramienta que se integrará a su buscador. Se trata de la “Experiencia Generativa de Búsqueda en Google”, que le ayuda a los usuarios a tener búsquedas más detalladas con respuestas precisas sobre determinado tema, recomendaciones de videos, sitios, la opción de escuchar la respuesta y no sólo leerla, ya que la convierte en audio, además de saber de qué fuente saca la información.

La “Experiencia Generativa de Búsqueda en Google” es sin duda una herramienta extraordinaria, tuve ya la oportunidad de probarla a través de Search Labs, aunque la compañía ya lo pondrá disponible para todos en México y América Latina. Lo vas a notar porque cuando realices una búsqueda, no tendrás que hacer nada extra, sino la Inteligencia Artificial Generativa ya estará incluida en el buscador y te arrojará las búsquedas detalladas que les platico arriba.

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Este es sólo un ejemplo de los nuevos servicios que podremos tener gracias a la Inteligencia Artificial, pero se trata apenas de la punta del iceberg, porque en los próximos meses y años veremos cómo esta tecnología se estará adaptando e integrando en más aspectos de nuestra vida cotidiana.

Pero hay que detenernos a reflexionar: ¿a la vida cotidiana de quiénes? ¿de cuántas personas?

Sólo en México la brecha digital, que se refiere a aquellas personas que aún no tienen acceso a Internet, aún es importante. “De acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en 2022 había 93.1 millones de personas usuarias de internet en México, lo que representó el 78.6 por ciento de la población de 6 años o más. Esto fue un aumento de 4.5 por ciento más de usuarios que en 2021” (Lo que ven entre comillas es un texto generado con “Experiencia Generativa de Búsqueda en Google”.

Bueno, pues la cifra de personas conectadas que arroja el Inegi, nos muestra que aún hay alrededor de 32 millones de personas que no tienen acceso a la conectividad.

Pero lo anterior es sólo una referencia y contexto para decirles que la brecha que la Inteligencia Artificial puede generar, no es la de falta de conectividad, sino la de conocimiento.

¿Cuántas personas en México han utilizado la Inteligencia Artificial Generativa (ChatGPT o ahora la Experiencia Generativa de Búsqueda en Google)? Hagan por favor el ejercicio de preguntar a su familia quiénes lo han utilizado. Pregunten a su pareja, hijos, padres, tíos, abuelos.

Las respuestas serán distintas de acuerdo al nivel de conocimientos digitales de cada familia y por supuesto, al nivel de conectividad, pues hay gente que no tiene acceso a un servicio de Internet, hay otras que se conectan ocasionalmente, unas más que son usuarios frecuentes, y otros que somos hiperconectados.

Y precisamente la brecha de conocimiento de la que les hablo se trata de ese conocimiento que tienen las personas hiperconectadas, que somos aquellos que tenemos acceso e interés de utilizar herramientas tan novedosas como la Inteligencia Artificial en sus distintas presentaciones, y esa gama que llega hasta el otro extremo en el que están aquellos que ni siquiera tienen acceso a banda ancha.

Mi mamá, mi tía, mis suegros, incluso mis cuñados que son jóvenes, me contestaron que no saben cómo utilizar la Inteligencia Artificial Generativa. De hecho, la mayoría me preguntó ¿qué es eso?

Recientemente vi un video de un youtuber llamado “Yulai”, quien regaló computadoras a una escuela en una zona rural, me parece que en el Estado de México. En el video aparece el youtuber rodeado de niños, a quienes les pregunta si alguna vez habían utilizado una computadora o si sabían cómo hacerlo. La respuesta de todos los niños, de primaria, fue que no. Evidentemente si a ellos les hubieran preguntado si han usado o saben qué es la Inteligencia Artificial Generativa, habrían dicho que no tenían la menor idea.

Pero también, en ese mismo video se ve cómo los pequeños emocionados, tienen el interés de aprender a utilizar una computadora, y varios se acercaron para hacerlo sin miedo alguno y con una habilidad nata.

No es que la Inteligencia Artificial genere, per se, la brecha de conocimiento, sino que se trata de un tema de educación digital.

Es innegable que esta brecha de conocimiento se hará más grande cada vez entre sectores de la población, no sólo en México, sino a nivel mundial. La Inteligencia Artificial incluso tiene la capacidad de cerrar esa misma brecha, pero no depende de ella, sino de la organización de las sociedades.

En específico, considero que para evitar esta brecha de conocimiento, es necesario y hasta urgente, que desde las autoridades en México, en las escuelas, la Secretaría de Educación Pública (SEP), incluyera en sus programas de estudio las lecciones para utilizar y aprovechar la tecnología, el Internet, y por supuesto, la Inteligencia Artificial.

De lo contrario, esta tecnología será adoptada por aquellos que tengamos el privilegio de tener conectividad y conocimientos para usarla. Sí, la adopción será gradual, pero si no existen por lo menos programas en las escuelas que los introduzcan a estas herramientas, la brecha de conocimiento digital se acrecentará cada vez más.

Google tiene un documento de “Prácticas Responsables de IA”, en el que describe diversos temas, entre ellos la forma en que los usuarios experimentan la Inteligencia Artificial.

Pero insisto, veremos en los próximos meses y años un sector de hiperconectados y otro de hiper rezagados.

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