La Amazonía puede ganar una nueva estructura de infraestructura para acercar la investigación, la producción y el mercado en cadenas como la del açaí, la castaña y los bioactivos. Un estudio divulgado por EY y coordinado por el Instituto Amazonia 4.0 propone la creación de una red de hubs físico-digitales, con operación fluvial y urbana, para ampliar el procesamiento local y reducir las pérdidas logísticas en la región.
El mapeo señala cuellos de botella bien conocidos por quienes actúan en el Norte: rutas fluviales esenciales pero costosas y sujetas a interrupciones; dependencia de la industrialización fuera de la región; baja diversificación productiva; e iniciativas de innovación aún concentradas en las capitales.
Para superar este panorama, los hubs reunirían laboratorios de I+D, biofábricas, servicios de comercialización y apoyo a nuevos negocios, con gobernanza multisectorial y una visión de largo plazo.
La propuesta prevé la integración de barcos-industria impulsados por energía solar, tratamiento adecuado de perecederos y trazabilidad de las cadenas mediante sistemas digitales, con una reducción estimada de hasta 40% en los costos logísticos y una disminución significativa de las pérdidas poscosecha, que hoy rondan el 25% en productos como el açaí.
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Según el estudio, la iniciativa tiene el potencial de generar 620 mil empleos verdes y 8.3 mil millones de reales al año en valor agregado hasta 2035, además de aumentar sustancialmente los ingresos de las familias extractivistas e incluir a los pueblos originarios en la participación económica mediante modelos societarios propios.
El cronograma propuesto comienza en 2025 con la implementación progresiva en regiones estratégicas como Manacapuru, Tefé, Santarém, Marajó, Marabá y Xinguara, en línea con el Plan Nacional de Bioeconomía y las proyecciones de crecimiento de la sociobiodiversidad amazónica en esta década.
Para EY, el rediseño de las cadenas extractivistas sólo alcanza escala con infraestructura capaz de organizar los flujos de producción, capacitación y negocios. “Este estudio refuerza nuestro compromiso de apoyar iniciativas que conectan innovación, inclusión productiva y valorización de la sociobiodiversidad”, afirma Ricardo Assumpção, socio líder de Sostenibilidad y CSO LATAM de la firma.