Los ataques de denegación de servicio no son una amenaza nueva en la web, pero están creciendo a niveles alarmantes. Hoy, Google Cloud, Amazon Web Services y Cloudflare anunciaron que en agosto pasado detectaron y bloquearon el mayor ataque DDoS del que se tenga registro hasta la fecha.
Las compañías identificaron anomalías desde el 25 de agosto y concluyeron que se trataba de un ataque DDoS de gran magnitud. Según se explicó, el mismo se generó al explotar una vulnerabilidad en HTTP/2, un protocolo de red para transportar contenido de baja latencia.
AWS registró un pico de 155 millones de solicitudes por segundo entre los días 28 y 29 de agosto. Mientras que para Cloudflare fueron poco más de 201 millones de solicitudes por segundo. Google, en tanto, sufrió el mayor caudal de esta arremetida con 398 millones de solicitudes por segundo.
Todas estas cifras son escalofriantes, puesto que exceden largamente el tamaño de los ataques DDoS que las empresas habitualmente afrontaban. Para ponerlo en contexto, en junio de 2022 Google Cloud bloqueó una campaña considerada como la más grande hasta ese momento. ¿Su pico? 46 millones de solicitudes por segundo. Por entonces, dicho récord había sido un 76 % mayor al máximo registro previo.