Las empresas de Elon Musk siguen en el ojo del huracán, y en esta ocasión se trata de Neuralink, ya que legisladores han solicitado a la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC) una investigación debido a un presunto engaño sobre los monos utilizados para probar un chip cerebral.
Un reporte de la revista Wired reveló que los legisladores han presionado para que investiguen si Elon Musk engañó a los inversionistas al omitir detalles sobre las muertes de al menos una docena de animales a los que se les colocaron quirúrgicamente sus implantes.
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La investigación de Wired señala que cuatro miembros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos alegaron que Musk emitió declaraciones falsas en septiembre sobre la muerte de los 12 primates.
Sin embargo, Musk afirmó en una publicación en X que ningún mono había muerto como resultado de un implante Neuralink, y agregó que la compañía se esforzó desde el principio por “minimizar el riesgo para los monos sanos”, eligiendo sólo aquellos que ya estaban cerca de la muerte.
“Señor Musk, sabe que esta afirmación es falsa”, dijeron los legisladores a Gensler, un exbanquero de inversiones de Goldman Sachs convertido en sheriff de Wall Street.
Wired afirmó que la presión de los legisladores para que se investigue a Musk está encabezada por el representante estadounidense Earl Blumenauer, de Oregón. Dijo que hasta el miércoles de la semana pasada, tres demócratas más se habían sumado al esfuerzo, incluidos Barbara Lee, James McGovern y Tony Cárdenas.