EE. UU. desarticula red de contrabando de GPUs a China, y Nvidia prepara alternativa para rastrear el destino de sus chips

El Departamento de Justicia (DoJ, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos desmanteló una operación de contrabando que exportaba ilegalmente tarjetas gráficas (GPUs) para el entrenamiento de modelos de Inteligencia Artificial (IA). Según las autoridades, la llamada “Operation Gatekeeper” culminó con múltiples arrestos y más de 50 millones de dólares en incautaciones.

Un comunicado de la Oficina de Asuntos Públicos del DoJ detalla que Alan Hao Hsu y su empresa, Hao Global LLC, cuya residencia se encuentra en Texas, se declararon culpables de contrabandear a China GPUs Nvidia H100 y H200, por un valor de al menos 160 millones de dólares, entre octubre de 2024 y mayo de 2025.

Estas GPUs están sujetas a controles de exportación impuestos por Estados Unidos. El objetivo de estas restricciones es frenar el progreso general del país asiático en el desarrollo de capacidades de Inteligencia Artificial (IA), particularmente su uso en aplicaciones militares y de espionaje.

Durante la operación, dos sospechosos adicionales fueron arrestados: Benlin Yuan, director ejecutivo canadiense de una empresa de TI de Virginia pero con lazos a una empresa china; y Fanyue Gong, propietario de una empresa de tecnología de Nueva York, ambos acusados ​​de conspiración para violar los controles de exportación.

Según las autoridades estadounidenses, los contrabandistas falsificaron la documentación de envío, clasificaron erróneamente las mercancías, utilizaron intermediarios y reetiquetaron las GPU con nombres falsos de empresas para ocultar su verdadero destino. Hsu recibió más de 50 millones de dólares en transferencias bancarias desde China para financiar el plan.

El caso se reveló el mismo día que Donald Trump, presidente de Estados Unidos, anunció un acuerdo para permitir la exportación de chips H200 a clientes autorizados con sede en China. El acuerdo excluye la exportación de las más recientes tecnologías Blackwell y Rubin –a ser presentada el próximo año– de Nvidia, a la vez que exige una contribución del 25% del precio final por la venta de chips a China.

Nvidia prepara solución a contrabando

En medio de estos casos de contrabando de chips a China, Nvidia supuestamente prepara una nueva tecnología que permitiría verificar de forma remota el país donde están operando sus chips, con lo que espera disminuir el contrabando de estos componentes.

Con base en fuentes relacionadas con el asunto, Reuters revela que esta tecnología de verificación ya estaría siendo probada por el diseñador de chips, la cual se lanzaría como una opción de software que los clientes podrían instalar en los componentes adquiridos.

La solución se integraría en las capacidades de cómputo confidencial de las GPUs Blackwell, con el fin de ofrecer a los clientes funciones de telemetría. Esto proporcionaría datos esenciales sobre el rendimiento de sus componentes en distintas instalaciones o Centros de Datos.

“Estamos implementando un nuevo servicio de software que permite a los operadores de Centros de Datos supervisar el estado y el inventario de toda su flota de GPU de IA. Este agente de software, instalado por el cliente, aprovecha la telemetría de la GPU para supervisar el estado, la integridad y el inventario de la flota“, señala la compañía en un comunicado.