A pesar de los ires y venires en las negociaciones para sellar la venta de Boost Mobile, marca prepago de Sprint, Dish Networks y T-Mobile informaron a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos que acordaron cerrar el acuerdo el primero de julio, luego de que en julio del año pasado firmaron el contrato original.
Las compañías habían tenido dificultades para llegar a un consenso sobre los términos de la transacción, pues el Director Ejecutivo de Dish, Charlie Ergen, quería modificar el costo para adquirir Boost y que los clientes de la marca tuvieran acceso a la red de T-Mobile.
Esto generó incertidumbre sobre si se lograría completar el acuerdo o no y la posibilidad de que T-Mobile buscara a otro comprador, ya que la desinversión de los activos prepago de Sprint es una de las condiciones que pusieron los reguladores federales para aprobar la fusión entre ambos operadores, que se finalizó al inicio de abril.
T-Mobile dijo, en el documento enviado a la Comisión, que el Departamento de Justicia determinó que cumplió con el requisito para proporcionar capacidad a Dish como se había acordado en un principio. El regulador tuvo que mediar las conversaciones para que Dish no demorara la transacción al querer más concesiones.
No obstante, el convenio establece que cualquiera de las partes puede rescindir el contrato si la transacción no finaliza el primero de julio, de acuerdo con la presentación la Comisión de Bolsa y Valores.
Dish pagará unos mil 400 millones de dólares por el negocio prepago de Sprint y alrededor de 3 mil 600 millones por sus licencias de espectro. Así, la compañía comenzará a desplegar su red móvil para convertirse en el cuarto operador móvil de Estados Unidos, según lo planeado en el acuerdo de la fusión de T-Mobile y Sprint.
El proveedor deberá implementar su servicio 5G con una cobertura nacional de 70 por ciento para antes de junio de 2023, o de lo contrario será acreedor de una sanción económica de hasta 2 mil 200 millones de dólares.
Cerrar el acuerdo con Dish significa cumplir otro requisito regulatorio para T-Mobile; sin embargo, en el ámbito laboral el proveedor va en sentido contrario. La empresa ha realizado recortes de miles de empleos, a pesar de que se comprometió a generar más plazas de trabajo tras la combinación con Sprint. En mayo se contaba la pérdida de 6 mil trabajos y hace unos días se sumaron al menos 400 despidos, según reveló el portal TechCrunch.