Broadcom cancela planes para instalar fábrica de semiconductores en España

Broadcom, compañía estadounidense de fundición y desarrollo de semiconductores, cancelará sus planes para instalar una fábrica de empaquetado de semiconductores en España, luego de que fracasaran las negociaciones entre la compañía y el gobierno, según revela un reporte de Europa Press.

El proyecto se había anunciado en julio de 2023, con una inversión de 1,000 millones de dólares (aproximadamente 850 millones de euros), y pretendía establecer la única planta de semiconductores “back-end” a gran escala de Europa. En su momento, la compañía esperaba incrementar su presencia en el mercado de empaquetado de semiconductores y aprovechar los beneficios otorgados por la Ley de Chips de la Unión Europea.

La Asociación Española de la Industria de Semiconductores (AESEMI) lamentó la decisión y enfatizó que si bien esto representa un revés para las ambiciones de España de convertirse en un centro estratégico de semiconductores, también pone de manifiesto la urgente necesidad de revisar y optimizar los mecanismos de atracción de inversiones para proyectos de esta magnitud.

Según el reporte de Europa Press, que cita fuentes cercanas al proceso, las negociaciones entre gobierno y empresa estuvieron estancadas durante meses, y la situación se complicó por los recientes cambios políticos, incluido el nombramiento de Óscar López como nuevo ministro de Transformación Digital, en sustitución de José Luis Escrivá.

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Adicionalmente, el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos habría aportado un efecto de incertidumbre respecto a los procesos de cooperación entre Europa y el país norteamericano. El mandatario mantiene una política arancelaria agresiva para obligar a empresas a instalarse en Estados Unidos.

Fuentes citadas por el medio también apuntan a que el regreso de Trump frustró otros planes para desarrollar una joint-venture para la producción de chips en España, en la que el gobierno español tenía previsto invertir hasta 400 millones de euros acompañada por una empresa estadounidense.

En un comunicado, la AESEMI señaló que se requiere de una reforma integral de la normativa europea sobre chips, con un marco legal más ágil y atractivo para garantizar la competitividad de Europa en el ecosistema global de semiconductores. La asociación aboga por una política industrial común que vaya más allá de los incentivos puntuales y facilite la coordinación de esfuerzos entre los Estados miembros de la UE para alcanzar los objetivos de autonomía estratégica.

“Si no se apuesta decididamente por un mercado industrial común en Europa, independientemente de las capacidades individuales de los gobiernos, fracasaremos en la lucha global por el liderazgo en la industria de los semiconductores. Seguiremos trabajando incansablemente para reforzar e impulsar el ecosistema español de los semiconductores y para atraer nuevas inversiones que favorezcan de manera transversal a nuestro tejido productivo”, añadió.