A pesar de los esfuerzos regulatorios de los diferentes países de América Latina para agilizar la implementación de infraestructura, aún se siguen encontrando obstáculos en la burocracia normativa a nivel municipal, y contradicciones entre las reglas y procedimientos que deben realizar las empresas de telecomunicaciones para instalar sus redes.
De acuerdo con el último estudio de 5G Americas sobre adopción digital, los gobiernos centrales no han logrado resolver del todo las trabas existentes en las localidades, cuyas administraciones dictan sus propias reglas, trámites y procesos, demorando la llegada de nuevas tecnologías.
Esta es una de las mayores barreras para el despliegue de infraestructura en la actualidad, debido a que, al no haber homogeneidad normativa, se elevan los costos y se retrasa la construcción y la inversión en nuevas redes, advierte el organismo.
Otro de los desafíos al que se enfrenta la región es la desinformación social (e incluso de las entidades de gobierno) sobre los efectos de instalar antenas o torres. Las personas suelen pensar que eso les provocará efectos adversos a la salud o contaminación visual, por lo que niegan o retrasan la entrada de los operadores.
En ese sentido, 5G Americas recomienda a los gobiernos latinoamericanos que intensifiquen sus esfuerzos en educar a la población respecto al impacto positivo de las redes en la sociedad, como el aumento de la cobertura y la posibilidad de acceder a otros servicios al estar conectados.
También podría elaborarse una propuesta de “buenas prácticas” en la implementación de infraestructura “para disminuir el impacto visual en el ambiente”, lo cual se sumaría a los requisitos que de antemano cumplen las compañías para preservar el paisaje urbano y natural.