Panamá ha dado un paso importante en la modernización de su infraestructura médica al contar con el primer equipo en la región con tecnología espectral, convirtiéndose además en el país con el tomógrafo más avanzado de Latinoamérica, un modelo de 512 cortes.
Esta innovación representa una gran diferencia tanto para los médicos como para los pacientes, ya que mejora significativamente el diagnóstico y el seguimiento de diversas enfermedades.