Brasil cuenta con 261.3 millones de accesos al servicio móvil y, de acuerdo con datos de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), el 1.6 por ciento de ese universo ya utiliza redes 5G. Más del 90 por ciento de los accesos de este tipo se dan en redes non-standalone y 316 mil 830 en la red standalone de América Móvil (316 mil 700) y TIM (130). El regulador agrega que del total de accesos registrados a agosto, 236.1 millones cuentan con banda ancha móvil.
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La densidad de los accesos es de 105.3 cada 100 habitantes. Se mantiene la disparidad de uso entre las distintas regiones del país: en el Sudeste la penetración de telefonía móvil es del 111.8 por ciento, mientras que en el Norte es de 91.2 por ciento. Por encima de la media también está el Centro-Oeste y el Sudeste y por debajo se ubican el Sur y el Nordeste. Además, sigue la supremacía del segmento pospago, que ahora representa 56.9 por ciento del total del mercado.
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Luego de que Oi Móvil dejara de aparecer en las cifras de la Anatel, situación que se concretó en febrero pasado, los tres prestadores que se quedaron con esa operación aumentaron su share en el mercado local: Vivo cuenta con más de 100.1 millones de accesos, Claro con 86.1 millones y TIM con 68.9 millones. El resto se divide entre Algar Telecom (4.2 millones) y otros prestadores de menor envergadura, que suman en conjunto 1.7 millones de líneas móviles.
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